Con una racha más que positiva de
16 puntos obtenidos, sobre los últimos 18 en juego, cuatro victorias hilvanadas
de manera consecutiva y siete unidades de las últimas nueve en disputa, en
condición de visitante, este martes desde las 15.30, el Deportivo Morón
intentará dar otro paso en procura de una cima del campeonato, que se halla
sólo a cuatro unidades (siendo el único equipo del lote de punta, que ya
quedara libre), cuando visite a Villa San Carlos, en el “Estadio Genacio Sálice”
de Berisso, sin televisación de aire y con el arbitraje de Mauro Biasutto
(junto a Carlos Qualizza y Eugenio Bevacqua como asistentes 1° y 2°,
respectivamente), en el marco de la undécima fecha del torneo de la Primera “B”,
temporada 2016/2017.
En medio de un proceso de “mejora
continua” y sostenida desde lo futbolístico, luego de un errático comienzo con
dos derrotas seguidas, el equipo de Walter Nicolás Otta se ha consolidado
partido a partido, hasta alcanzar un nivel de rendimiento muy cercano al óptimo
y al esperado por todos, en la previa del torneo, de acuerdo a los antecedentes
de un plantel rico en nombres y condiciones individuales, cuya base se
mantuviera casi en su totalidad, potenciado por la llegada de siete refuerzos
de jerarquía, para darle más variantes a un once que, en la temporada pasada,
se quedara en la “puerta” del ascenso, en algún punto, quizá por ausencia de recambio
necesario.
En este marco, frente a
Excursionistas y Español, el viernes último, el Gallo demostró las credenciales
que lo han llevado a erigirse en protagonista en cada cancha, tanto en el Nuevo
Francisco Urbano, como de visitante, con la saludable intención de apropiarse
del monopolio del balón en el mediocampo, para desde allí generar el
desequilibrio ofensivo, con sus delanteros de lujo y que, por fortuna, la vienen
“embocando” seguido; además de una intensidad en todas sus líneas que se traduce
en la solidaridad de volantes centrales y externos, que a la vez acompañan y
llegan al fondo con peligro, al igual que sus laterales, de cuyas proyecciones
han llegado centros que propiciaron goles, partiendo de la base cada vez más
sólida, de una última línea que se consolida semana a semana y no da ningún
tipo de ventajas a sus rivales.
Con todos estos argumentos, el
Gallito procura traerse de Berisso tres nuevos puntos, que sostengan sus
aspiraciones de pelear la punta y continúen alimentando la ilusión de todo un
Oeste que comienza a soñar despierto…, y en grande.
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