UN PUNTO QUE SUMA

En un partido parejo, de tono menor y con un desarrollo disputado y de trámite cambiante, el Deportivo Morón se trajo un punto de su excursión a Berisso, al igualar en cero con Villa San Carlos, en el “Genacio Sálice”, para prolongar su racha invicta a siete encuentro sin caídas, con cuatro visitas en fila sin derrotas (dos empates y otros tantos triunfos), las últimas tres sin recibir goles en contra, además de haber obtenido, en definitiva, 17 de los 21 puntos en juego, desde la tercera jornada en delante, tras el errático comienzo de temporada con dos traspiés consecutivos.

Dentro de un cotejo que, pudo haber sido victoria y, en los cuatro minutos de descuento, también haberse convertido en derrota, el equipo de Walter Nicolás Otta exhibió una mejor imagen durante el primer tiempo, de trámite mayoritariamente favorable al Gallo y más asimilable a sus últimas actuaciones, donde contara con un par de situaciones claras de gol, para arribar al descanso con una “luz” de ventaja, como un tiro libre prodigioso de Gerardo Martínez que habría de estrellarse en el vértice izquierdo del arco defendido por Del Riego, y dos cabezazos ofensivos de Emiliano Mayola, ambos con la mala fortuna de ir direccionados a la humanidad del arquero de la “Villa”, desde inmejorable posición, luego de sendos tiros de esquina a cargo del propio Gerardo.

Sin embargo, en el segundo tiempo, a Morón le costaría hacer pie en el terreno del “Genacio Sálice”, resignando la posesión del balón y con él, la herramienta y argumento principal para generar desequilibrio ofensivo, en una delantera con el “Bicho” Rossi, aunque sin Damián Akerman, marginado a último momento por una molestia.

Así las cosas, en la etapa complementaria, el Gallo se acercaría con peligro sólo en un par de ocasiones, hasta el arco de “La Villa”, a través de una buena jugada individual de Matías Pardo, cuyo centro de izquierda al centro recorrería todo el área chica del local, sin que ninguno de sus compañeros pudiera sacar rédito del único remate con destino de gol, en los últimos metros de San Carlos, además de un remate desde larga distancia de Gerardo Martínez, que encontrara atento al arquero, en el retroceso presuroso para evitar un golazo de “emboquillada”.

En los minutos finales, y cuando el partido parecía encaminado a un empate inamovible, Morón retrocedería demasiado, permitiendo el adelantamiento de los volantes locales, y sufriendo en definitiva, un puñado de zozobras evitables, en especial, durante los cuatro minutos de descuento adicionados por Mauro Biasutto (de debut absoluto dirigiendo al Gallito), en algunas de ellas contenidas por Milton Alvarez y en la más riesgosa de todas, en el último suspiro del tiempo extra, apelando a un rechazo “in extremis” de Franco Racca, para evitar el gol postrero de Villa San Carlos, lo que hubiese resultado un premio excesivo al envión final del local.

En definitiva, y con la imagen final del descuento, el empate no resultaría mal resultado para un Morón que, si bien pudo haberlo ganado en el primer tiempo, en el complemento también pudo perderlo y volverse con las manos vacías al Oeste.

Por todo ello, sin lugar a dudas…, un punto que suma.

@elgallogustavo.

                                         Foto: gentileza, Prensa Deportivo Morón.