viernes, 30 de noviembre de 2018

¡Feliz día a todos nosotros!

El 30 de noviembre se instaura oficialmente, mediante votación abierta de los socios e hinchas del Club Deportivo Morón, como el “Día del Hincha del Deportivo Morón”, en conmemoración del hito futbolístico más trascendente alcanzado a la fecha por la institución, con el ascenso a Primera División, precisamente un 30 de noviembre de 1968.

En aquella gloriosa fecha, y bajo la presidencia del extinto e inolvidable Dr. Virgilio Machado Ramos, el Gallo accede al logro máximo de su historia en materia futbolística, constituyendo en ese entonces, uno de los clubes más jóvenes del fútbol argentino en conseguir tamaño logro, teniendo en cuenta su fundación un 20 de junio de 1947, es decir, nada más (y nada menos) que con apenas 21 años de existencia.

Cuentan las crónicas de la época que, aquél lejano y maravilloso 30 de noviembre de 1968, el Deportivo Morón enfrenta a Unión de Santa Fe, en un Estadio Francisco Urbano abarrotado, para con el cero a cero final, acceder a uno de los seis ascensos a Primera División que otorgaba el “Torneo Reclasificación” de dicho año, con una formación que hoy constituye un emotivo mural dentro de nuestra nueva “casa”, el Estadio Nuevo Francisco Urbano, inaugurado el 26 de julio de 2013: Bargas, Solana, Pérez, Semenewicz, Ricci, Busti, Paflik, R. López, Ochoa, Gigliani, González. D.T.: Ricardo Aráuz.



Unico y fugaz antecedente al presente, de nuestro sueño de Primera (luego de permanecer apenas un año en la élite del fútbol vernáculo, en 1970 descendería a la Primera “B”), el 30 de noviembre de 1968 perduraría marcado a fuego en la historia del Deportivo Morón, razón que llevara a sus socios e hinchas, hace tan sólo un par de años atrás, a elegir dicha fecha como el “Día del Hincha del Deportivo Morón”, que nos identifica y reúne cada año, a la espera de un nuevo logro futbolístico, de características similares, que tal vez nos obligue a repensar en el futuro, nuestro día especial de agasajo, con un anhelado y demorado regreso a la “A”, desvelo de generaciones que solamente “vivieron” dicha gloria, a través del recuerdo emocionado de padres y abuelos.


Hoy, a 50 años de un hito incomparable e inolvidable de nuestra historia, homenajeamos a los "héroes" de 1968, que además de concretar la "gesta" futbolera más trascendente, con el ascenso a Primera, inspiraran también la fecha emblemática como hinchas del Deportivo Morón: el 30 de noviembre, nuestro día.

¡Felicidades y aguante el Gallo!.


@elgallogustavo.

lunes, 26 de noviembre de 2018

¡"Cordobazo"!

Desde la asunción de la dupla técnica, conformada por Alejandro Julián Méndez y Reinaldo Walter Pico, el Deportivo Morón comenzó a dar señales positivas en el juego, incluso tal vez un partido antes, en la injusta derrota ante Arsenal, que constituyera el partido despedida de Walter Otta, con una idea más vertical y de búsqueda continua del arco contrario, además del compromiso de una mayor cantidad de protagonistas en ofensiva, a partir de un esquema 4-2-3-1, con volantes que pisan constantemente el área rival y laterales que incursionan en ataque de manera permanente, garantizando de este modo, un protagonismo en el desarrollo, que el Gallo sostuviera en todos los encuentros precedentes, inclusive de visitante, ante el "Lobo" norteño en San Salvador de Jujuy.

Sin embargo, dentro de este saludable y estimulante proceso de "mejora continua", uno de los pocos datos negativos que arrojaran las antecedentes recientes, resultaría sin dudas la falta de contundencia que evidenciara el equipo, en los últimos tres cotejos, ante Defensores de Belgrano, Gimnasia y Esgrima de Jujuy y Ramón Santamarina de Tandil, a pesar del triunfo final por 2 a 0, del lunes pasado, puesto que el Gallo habría de merecer mejor suerte en lo empates ante el "Dragón" y el "Lobo", conforme a su superioridad en los '90, pero la ausencia de eficacia en los metros finales, habrían de impedirle concretar algo de lo mucho y bueno generado en ofensiva en ambos encuentros, privándolo en dichos casos, de dos victorias que debieron ser tales, en observancia a los méritos futbolísticos demostrados y la cantidad de ocasiones de gol malogradas en uno y otro cotejo.

Por el contrario, este domingo en Alta Córdoba, en un compromiso de riesgo ante el exigente Instituto de Darío Franco, el Gallo se alzaría con un "triunfazo" histórico (es la primera vez que derrota a "La Gloria" en el "Juan Domingo Perón"), con argumentos inversos a los demostrados en los partidos anteriores, pero igualmente sólidos y convincentes: en efecto, sin brillar como en otras oportunidades, ni tampoco ejerciendo el protagonismo acostumbrado de las fechas pasadas, el equipo de Méndez-Pico apelaría a la inteligencia para "golpear" en los momentos justos, evidenciando la contundencia no esgrimida en los partidos precedentes, con un Damián Akerman muy recuperado y participativo, y fundamentalmente, con un Junior Leandro Mendieta "intratable", que consolidaría todo lo bueno demostrado hasta aquí, con el "olfato" y la contundencia goleadoras que el equipo requería para no sufrir sobresaltos y quedarse con tres puntos tan merecidos como "trabajados", con la paciencia y la constancia del "orfebre".

En efecto, con el único cambio de Gastón González con el "dorsal 10", en lugar del lesionado Nicolás Ramírez (nada menos), el Gallo sobrellevaría la ausencia del jugador más desequilibrante en ofensiva, para ganar en recuperación y primer pase, con un buen ingreso de González, por momentos acompañando al "doble cinco" de Matías Nizzo y Cristian Lillo, cada encuentro en mejor nivel individual y de conjunto, y por otros sumándose en ofensiva a Matías Pardo, Junior Mendieta y Damián Akerman, procurando aprovechar las ventajas que otorgaba el "dueño de casa" en su última línea.

Así las cosas, dentro de un primer tiempo con escasas llegadas a los arcos, en el caso de la visita, merced a otra gran tarea de toda la defensa, con puntos altos en todos sus integrantes, pero con especial hincapié en un Maximiliano Paredes que se impusiera por igual, tanto en la marca como en la proyección, y un Emiliano Mayola que, pese a "bailar con la más fea", esto es, contener al siempre peligroso Pablo Vegetti, cumpliría una tarea tan silenciosa como notable, evitando que el "gigante" le complicara la tarde a Bruno Galván, más allá de un único cabezazo franco al travesaño, en el complemento.

Sobre los '27, una contra "rápida y furiosa" desde el área de Morón, se extendería con una notable habilitación ofensiva de Damián Akerman en el círculo central, con destino a Gastón González, quien encarando solitario por el sector derecho del ataque del Gallo, la "cambiaría toda" para el propio Damián, que luego de dar el pase en profundidad, había corrido en búsqueda de la "descarga", para con un "pase gol" NOTABLE de cabeza (máxime tratándose de un goleador), dejase solo por el sector opuesto del área chica a Junior Mendieta, que con un cabezo a la red colocara en ventaja a la visita, culminando una "triangulación" ofensiva para el aplauso.

Hasta el final de la primera etapa, Damián contaría con otra chance, en este caso sobre la derecha, desairando a su marcador con un amague hacia adentro y sacando un remate diestro con destino de gol, que la interposición providencial de otro defensor haría que el máximo goleador histórico de Morón, no se llevara el "premio extra" de su conversión, en su mejor tarde en mucho tiempo, coincidente con la continuidad y la confianza que le otorgaran Alejandro Méndez y Walter Pico, desde su llegada.

Ya en el complemento, y cuando el local se preparaba para intensificar su búsqueda ofensiva, luego de un primer tiempo sin grandes sobresaltos para Bruno Galván y su defensa, a los cinco minutos, y tras un tiro de esquina ejecutado por Gastón González desde la derecha, "Maxi" Paredes, atento en ataque, como toda la tarde, volvería a impulsar de cabeza, el rebote fuera del área de los defensores de Instituto, para que Junior Mendieta, aprovechara el adelantamiento de su "celadores", pensando en la jugada siguiente, y con un toque de sutileza impulsarla apenas por encima del achique del arquero, para luego sí, definir solo ante el arco vacío, en un gesto técnico magistral del correntino, unido a su inteligencia y concentración, para poner a Morón arriba por diferencia de dos, en Alta Córdoba.

A partir del 2 a 0, Instituto acusaría recibo (en las tribunas, arrojando un petardo que aturdiría por algunos minutos a Galván) y Morón podría haber ampliado la diferencia de contra, manejando los "hilos" del encuentro a través de su mediocampo, con Nizzo y Lillo como "dueños" del mismo y González en el primer pase ofensivo, en procura de la velocidad de Mendieta en "su" tarde, "Pichin" Pardo y el "inoxidable" Damián Akerman, luego reemplazado por Agustín Lavezzi, recuperado de su desgarro en tierras jujeñas.

Con Gerardo Martínez en cancha, por Pardo, la dupla técnica del Gallo buscaría defenderse con la pelota, aunque las ganas del local, con vergüenza pero sin ideas, generarían las dos chances más claras del partido, en apenas un par de minutos, promediando la etapa, con el referido cabezazo de Vegetti al travesaño y otro desvío del segundo marcador central, Alan Aguirre, apenas desviado sobre el "caño" derecho, de un Galván que fallaría en el cálculo de ambos centros, quizá aún como consecuencia del petardo que lo conmocionara en el inicio de la etapa.

Con el pitazo final de Germán Bermúdez, de regular arbitraje y algunos yerrros, el Deportivo Morón se alzaría con un triunfo histórico en Alta Córdoba (el primero en el torneo, fuera de casa, y el tercero en el campeonato, segundo consecutivo), para empezar a soñar con el Reducido y la clasificación a la próxima edición de la "Copa Argentina", de pleno derecho.

¡"Cordobazo" del Gallo!.



@elgallogustavo.



sábado, 24 de noviembre de 2018

No voy en "Fly", voy en "bondi"...

Luego del enorme desahogo que significara el triunfo frente a Santamarina de Tandil, en el postergado de la décima fecha (primera victoria por dos goles, desde su regreso a la categoría, en 2017 y tras 17 años de ausencia), el Deportivo Morón afrontará un compromiso de riesgo, este domingo a partir de las 19, cuando visite en el "Estadio Juan Domingo Perón", del Barrio Alta Córdoba, a Instituto Atlético Central Córdoba de aquella provincia, con el arbitraje de Germán Bermúdez, acompañado de Diulio Montello y Gisela Bosso, como asistentes uno y dos, respectivamente, y sin televisación en vivo, en el marco de la undécima jornada del Torneo de la Primera "B" Nacional, temporada 2018/2019.

Con tres encuentros sin derrotas, desde la asunción de la dupla técnica, conformada por Alejandro Julián Méndez y Walter Reinaldo Pico, con dos empates (Defensores de Belgrano y Gimnasia y Esgrima de Jujuy) y un triunfo (el referido 2 a 0, del último lunes, ante Ramón Santamarina, en el Nuevo Francisco Urbano), el Deportivo Morón viene en un proceso de mejora continua, a partir de una idea futbolística que entusiasma e ilusiona, fundada en la búsqueda constante del arco contrario, con la mayor cantidad de intérpretes posibles en ofensiva, y con el único dato negativo de la falta de contundencia en el arco contrario, para marcar en la "chapa" definitiva de los encuentros disputados, las diferencias en el juego que lo mostraran siempre como protagonista, aún en terreno ajeno, como fuera el caso de San Salvador de Jujuy, donde el triunfo se le negara de manera increíble e injusta, a escasos treinta segundos del pitazo final del árbitro.

Respecto del once de inicio que consiguiera el pasado 19 del corriente, la primera victoria en la "era Méndez-Pico" y la segunda en todo el campeonato (la anterior había sido en la sexta fecha, con Agropecuario, también en el Oeste, aunque con Walter Nicolás Otta en el banco), la única ausencia confirmada y más que sensible, para el "andamiaje" de conjunto, será la baja obligada de Nicolás Ramírez, quien golpeado en Jujuy, a punto estuviese de quedar marginado en la fecha original de disputa del cotejo con los tandilenses, por una fuerte contractura en su gemelo derecho, y que el aplazamiento del partido con Santamarina, hasta la reciente "Fecha FIFA", permitiera que llegara "entre algodones" al mismo, jugando un primer tiempo de gran nivel, hasta que el dolor le dijera "basta" y tuviese que ser reemplazado en el complemento por Gerardo Martínez (autor de la apertura del marcador, con un auténtico golazo, además de ser el responsable del tiro libre, de cuyo rebote en el arquero naciera el segundo, en el "estreno" oficial con gol de Iván "Pachu" Alvarez).

Precisamente, Gerardo Daniel Martínez resultaría el reemplazante "natural" de "Nico" Ramírez, a fin de mantener el esquema de 4-2-3-1, más allá de las diferencias de características entre uno y otro, aunque no debería descartarse la opción de Gastón González, ya restablecido del traumatismo en el tórax que sufriera en Sarandí, y que lo mantuviera alejado por algunos partidos, hasta su reciente vuelta, en el segundo tiempo con Santamarina, en un rol más de creación que de contención, aunque colaborando con el consolidado "doble cinco" de Matías Nizzo y Cristian Lillo.

En el rubro "altas", quien seguramente ocupará un lugar en el banco de los suplentes, será Agustín Lavezzi, un "Pochito" que luego de un auspicioso debut ante Gimnasia y Esgrima, en la calurosa Jujuy, resultara marginado del último compromiso, por un pequeño desgarro en el isquiotibial, lesión de la cual ya se halla recuperado, para alegría de un Morón con "mal de ausencias", especialmente entre sus hombres de punta.

Así las cosas, con un plantel que emprendiera su periplo, con destino a Córdoba, en la madrugada del sábado, para arribar a la "capital del fernet con coca", en los albores de la misma jornada, dada la decisión dirigencial de enviar a la delegación en micro, a fin de comercializar las 35 plazas del chárter aéreo, de la empresa que suministra dicho servicio a costo cero (a cambio de la publicidad en la camiseta), con destino a periodistas partidarios, directivos y colaboradores, a razón de dos mil peso,s ida y vuelta, a fin de emplear el dinero recaudado (alrededor de $ 70 mil) para costear los gastos de hospedaje en el "Gran Hotel Dorá" cordobés, en una determinación tan comprensible desde la necesidad, como discutible en lo formal y conveniente.

Como sea, por tres puntos que nos acerquen a la zona de Reducido, y nos aproximen un paso más al objetivo adicional de clasificar a la venidera edición de la "Copa Argentina", a la que accederán los primeros 12 de la categoría, promediando la cantidad de puntos obtenidos y de partidos jugados, hasta la fecha 13 (en virtud de la jornada libre, que no todos cumplimentaran aún, de acuerdo al fixture, tal el caso del propio Morón), el Gallo procurará dar el "batacazo" en Alta Córdoba, como a punto estuviese de lograrlo, en la última visita lejos de "casa", ante el "Lobo" jujeño.

No voy en "Fly", voy en "bondi"... Por una victoria con tonada de Córdoba "Capiiiital".



@elgallogustavo.



jueves, 22 de noviembre de 2018

La decisión más dolorosa...

En las últimas horas, y en virtud de la falta de respuestas serias y concretas, de parte de las autoridades del club, respecto de la mora en el pago de sus haberes de octubre, los empleados de la institución, autoconvocados en Asamblea de trabajadores, decidieron con infinita pena, tomar la decisión más dolorosa, pero insoslayable a la fecha, desgastados por las falsas promesas repetidas y agotados de padecer situaciones tan injustas como ingratas, puertas adentro de sus propios hogares, ante la falta de pago de sus sueldos, compromiso legal y obligación moral de un club, que aparece como insensible y falto de la más elemental empatía, frente a la necesidad y el reclamo justificado del otro, del par que nos abre la puerta todos los días del año, y hace de la institución un ámbito "amigable" y "vivible": en efecto, el próximo lunes 26 de noviembre, los empleados del Deportivo Morón irán al paro, con el consecuente acompañamiento de UTEDyC, vía carta documento de intimación de pago en el plazo más perentorio posible, la notificación de la medida de fuerza en plenario y la correspondiente denuncia de la actual situación ante el Ministerio de Trabajo.

Demás está decir, que este cese de tareas, resuelto por los empleados del club para el lunes 26 de noviembre, constituye el último y lamentable episodio de una situación de inaudita postergación salarial, sólo sostenida y soportada por sus protagonistas, única y exclusivamente a partir del sentido de pertenencia que unánime y unívocamente siente por el club, puesto que sólo desde ese lugar, de hinchas del Deportivo Morón, más allá del rol de trabajadores. puede comprenderse que hayan podido llegar al día de hoy, sin haber dispuesto una medida similar en el pasado reciente, incluso negándose a prestar servicios durante un partido oficial, con el consecuente perjuicio deportivo que ello hubiese traído aparejado, pese a la legitimidad sin discusión del reclamo que la determinara.

Y es que, si por estas horas los trabajadores del club, a quienes todos conocemos y los saludamos con afecto, cada vez que frecuentamos nuestra "segunda casa", en tanto hinchas, socios y en último término, también empleados asalariados, según convenio sectorial, han decidido recién ahora tomar una medida de fuerza, revela por sí solo que únicamente el amor incondicional por el Deportivo Morón, los pudo hacer soportar hasta acá, situaciones indignas dentro y fuera del ámbito laboral, que no es otro que el objeto de su pasión, al igual que para el resto de todos nosotros.

Y es allí también, donde lamentablemente, la dirigencia habría de posicionarse para utilizar y valerse de esa condición de amor, no por el ámbito laboral, sino por el club objeto de su pasión y del que participan de diferentes maneras, muchos de ellos activamente a través de peñas y filiales, para "mandar a la cola" de los reclamos, las necesidades urgentes de los empleados que menos ganan en la institución (en comparación con otros "asalariados") y someterlos a situaciones de indignidad gratuitas y sin sentido, a pesar de jamás abandonar sus puestos de trabajo, ni negar colaboración alguna, anteponiendo a Morón, incluso por encima de sus demandas familiares y penurias personales.

Porque, en definitiva, para los empleados del Deportivo Morón, la resolución tomada en la fecha, de ir al paro el próximo lunes 26 del corriente, constituye una "puñalada" al propio corazón, con la tristeza infinita de sentir en el fuero más íntimo, y más allá de la racionalidad y legitimidad de demanda y medida de fuerza, que la carta documento en ciernes, se la estuviesen enviando a alguno de sus afectos más entrañables, casi tanto como si intimasen legalmente a un padre o un hijo.

Propio de un club en indisimulable crisis. De un Deportivo Morón que, institucionalmente, genera preocupación, dolor e impotencia.



@elgallogustavo.



lunes, 19 de noviembre de 2018

"En el camino"

Y la tercera, fue nomás la "vencida".

Luego de dos antecedentes con empates en uno, desde la asunción de la dupla de Alejandro Méndez y Walter Pico, ambos con "sabor a poco", con un muy buen primer tiempo frente a Defensores, también en el Oeste, y un segundo tiempo donde no podría sostener la intensidad de aquella primera etapa, prologando luego en el injusto final del compromiso en San Salvador de Jujuy, con aquél instante final y "fatal", en el que Gimnasia y Esgrima se quedara con un punto, en la "última bola" del encuentro, en esta ocasión la fortuna la haría un necesario "guiño" al Deportivo Morón, no para sumar tres puntos no justificados, sino todo lo contrario, para consolidar en el resultado, por primera vez en la "era Méndez-Pico", el cúmulo de buenas intenciones y de merecimientos varios, evidenciados nuevamente ante Santamarina, en especial durante los primeros '45.

Así las cosas, un Morón que saldría a recuperar el cotejo ante los de Tandil, suspendido por la lluvia del pasado sábado 10 de noviembre, presentaría los mismos once que disputarían un gran partido ante Gimnasia de Jujuy, con Nicolás Ramírez nuevamente como eje fundamental de la creación y la ofensiva del Gallo, a pesar de andar "entre algodones", por el golpe en el gemelo que sufriera en el mismo partido ante el "Lobo" norteño, y que de haberse podido disputar hace algo más de una semana, en su fecha original, hubiera quedado marginado de los titulares en aquella oportunidad.

Por fortuna, la semana de "descanso" obligado, permitiría que el jugador más desequilibrante del Gallito llegase con lo justo, para calzarse el dorsal "10", manejando los "hilos" del equipo y volviendo a jugar un gran primer tiempo, y parte del complemento, hasta que la secuelas de su lesión le dijeran "basta" a sus ganas de seguir en cancha.

Y es ahí donde aparcería Gerardo Martínez, ausente en el periplo jujeño, por la inminencia de una paternidad, que hoy ya constituye una feliz realidad, para aportar esa cuota de calidad única, que sólo los "elegidos" pueden esgrimir con la pelota bajo la "suela", y abrir el marcador con un tiro libre soberbio, desde la derecha del ataque local, pelota "envenenada" por fuera del único defensa puesto de "barrera", que sorprendería al golero de Santamarina, sobre su palo zurdo, un Nicolás Rodríguez en visible inferioridad física, por una dolencia en su rodilla (cuando la visita, ya había agotado los cambios), pero que en este caso, no resultaría atenuante para una ejecución magistral, como sólo Gerardo sabe hacerlo y nos tiene gratamente acostumbrados.

Con la ventaja tranquilizadora, a los '27 del segundo tiempo, sólo era cuestión de no cometer errores o distracciones en defensa, y apostar a alguna contra que terminase por "liquidar" el pleito, con el dato insoslayable de un arquero rival disminuido y sin posibilidad de ser sustituido, procurando probar al arco desde todos los sectores, para inducir al propio Rodríguez a algún yerro o rebote largo, producto de su imposibilidad de asentarse con normalidad, sobre una de sus rodillas.

Y sería entonces allí, donde aparecía el tercer "héroe" de la jornada de lunes feriado, en el Nuevo Francisco Urbano, con el ingreso del juvenil volante ofensivo, Iván Alvarez, de notables antecedentes recientes en Reserva y con características futbolísticas bastante asimilables al propio Gerardo, para debutar oficialmente con la casaca del Gallo, a los '37 del segundo tiempo, y con tan sólo seis minutos de juego, redondear la "tarde soñada" en su presentación en sociedad, al capturar un rebote largo del arquero visitante, tras un tiro libre desde tres cuartos de cancha, y puntearla para el segundo grito de gol, a los '43 de la etapa complementaria.

Antes, claro está, hubo un gran primer tiempo del equipo de Méndez-Pico, donde Morón habría de generar no menos de cinco o seis jugadas claras de gol, pero la falta de "tiza" que viene evidenciando en los último cotejos, habría de repetirse en aquella primera parte con Santamarina, en la cual un Morón ampliamente superior a su rival y protagonista en toda la etapa, debería retirarse a los vestuarios con una igualdad en cero, otra vez demasiado "amarreta" e injusta para lo demostrado por uno y otro en el césped del "Carlos Castellón".

Con el mismo orden y solidez defensivos, que demostrara en Jujuy (a excepción, claro está, de la "bola del final", a falta de 30 segundos), sostenidos en otro buen partido de Franco Racca, y un Nicolás Martínez muy recuperado, seguro en la marca y con criterio para "trepar" en ataque, mas el correcto acompañamiento de Emiliano Mayola y Maximiliano Paredes, el buen desempeño se prolongaría en el mediocampo, con un Matias Nizzo en interesante nivel y Cristian Lillo correcto como siempre, sumados al "tridente virtuoso" de Ramírez, Matías Pardo y Junior Mendieta, éste último de gran partido y solidario sacrificio, constituyendo otra de las figuras destacadas de un Morón, con varios puntos altos en su rendimiento individual y colectivo.

Sin olvidarnos, ni por un minuto, de Bruno Galván, que en un partido en el cual lo "llamaran" a intervenir en escasas ocasiones, habría de subirse también al "podio" de los mejores, a partir de un par de atajadas fundamentales, como ante el cabezazo solitario del "inoxidable" Martín Michel, para no soportar sobresaltos, inesperados por el desarrollo del juego, en aquellos instantes del segundo tiempo, en los cuales Morón no podría sostener la presión alta y la intensidad de la etapa de inicio, y de ese lógico bajón de "tensión", Santamarina encontrase sus contadas oportunidades para manejar la pelota y preocupar a un Galván, siempre atento y eficaz, cuya seguridad ha sabido transmitir a sus compañeros de la última línea, desde su silencioso arribo al arco de Morón.

Con el pitazo final de Bruno Bocca, de regular arbitraje, con dos infracciones dudosas en el área visitante (una en cada tiempo), que por lo menos una, como mínimo, desde la distancia de nuestra labor pareció una clara falta de penal, en perjuicio de Matías Pardo, el Gallo alcanzaría su segundo triunfo en el campeonato y el primero con la dupla Méndez-Pico, en el banco, reafirmando una idea generosa y gratificante, de buscar continuamente el arco rival, con muchos protagonistas en ofensiva, aunque con el "asterisco" de la falta de profundidad que evidencia, y que lo priva de trasladar a la "chapa" final de los encuentros, el protagonismo y dominio que asume desde el inicio, por su recurrente falta de contundencia en las redes rivales.

Pese a ello, la tercera fue la "vencida" y eso es lo más importante, para un Morón que, de a poco y en un proceso de crecimiento sostenido y constante, va construyendo una identidad de conjunto auspiciosa, que parece encaminarse a recuperar los objetivos perdidos y la ilusiones postergadas a poco de iniciado el presente torneo.

"En el camino".



@elgallogustavo.



domingo, 18 de noviembre de 2018

A ganar o ganar, Morón...

Tras la suspensión del pasado sábado, debido a las adversas condiciones climáticas, este fin de semana de "Fecha FIFA" no habrá descanso para el Deportivo Morón, que recuperará el postergado de la décima jornada del Torneo de la Primera "B" Nacional, frente a Ramón Santamarina de Tandil, en el Nuevo Francisco Urbano, el lunes 19 del corriente, a partir de las 17, con el arbitraje de Bruno Bocca, acompañado de Ernesto Callegari y Nadia Chiariotti, como asistentes uno y dos, respectivamente, sin televisación de aire.

Con la obligación de volver a sumar de a tres, en el mismo escenario donde el Gallo ganara su único partido hasta el momento, por entonces con Walter Otta en el banco de suplentes, los ahora dirigidos por la dupla de Alejandro Julián Méndez y Walter Reinaldo Pico, procurarán que "la tercera sea la vencida", luego de dos buenas presentaciones ante Defensores de Belgrano y Gimnasia de Jujuy, en los que se pusiera en ventaja, jugando a gran nivel, por momentos, pero debería conformarse con sendas igualdades, cuando en la "balanza" de los merecimientos habría de justificar mucho más, en especial en San Salvador de Jujuy, donde el triunfo se le "escurriera de las manos", a sólo treinta segundos del pitazo final y en la "última bola" del partido.

Con la recuperación de Gastón González, restablecido del traumatismo de tórax sufrido en Sarandí, en el cotejo que significaría la despedida inesperada de Otta, al cabo de la derrota con Arsenal, la ausencia repetida de Facundo Pumpido, con una tendinitis rotuliana, que lo viene marginando en las últimas jornadas y la duda respecto del estado de Nicolás Ramírez, quien iba a ser baja a último momento, si el partido con Santamarina se hubiese jugado el último sábado, pero la postergación podría haber permitido la mejora del golpe en el gemelo soportado en Jujuy, que en principio pareciera un desgarro y luego, ecografía de por medio, el mismo fuese descartado y se comprobara una hematoma con derrame, entre el sóleo y el mismo gemelo.

Así las cosas, un plantel del Deportivo Morón que agota la horas previas al cotejo con Ramón Santamarina de Tandil, concentrados en el Complejo de Gabriel Calderón, en Mariano Acosta, presenta la novedad de la inclusión de Federico Prada (así como la ausencia del juvenil Matías Guayaré), el volante que llegara como refuerzo para el presente torneo, con pasado en el ascenso español y un último paso por Sacachispas, y que viniera desempeñándose en la Tercera, antes conducida por Carlos Adducci y desde las últimas fechas, por Alejandro Esteban "Chiche" Migliardi y Sebastián Sibelli.

En definitiva, con la premisa de sumar de a tres, por segunda ocasión en el año y por primera vez bajo la nueva conducción técnica de Méndez-Pico, el Gallo necesita imperiosamente ganar para recuperar terreno en la tabla de posiciones, alejarse un poco más en la de los promedios y, conocido el sistema de clasificación a la próxima fase final de la "Copa Argentina", tratar de quedar entre los doce primeros, al cabo de la fecha 13, en el promedio entre los partidos jugados y los puntos obtenidos, teniendo en consideración la jornada libre que impone el Torneo de la "B" Nacional.

A consolidar la mejora evidenciada en el juego, con su imprescindible correspondencia en el resultado. 

Esto es... A ganar o ganar, Morón.



@elgallogustavo.



sábado, 10 de noviembre de 2018

Morón y Santamarina de Tandil, "pasado por agua"

A raíz de las inclemencias climáticas, el encuentro entre Deportivo Morón y Ramón Santamarina de Tandil, que debía disputarse en la fecha, en el Nuevo Francisco Urbano, correspondiente a la décima fecha de la Primera "B" Nacional, ha sido SUSPENDIDO.

El lunes, en la Asociación del Fútbol Argentino (AFA), deberá decidirse la fecha de reprogramación del partido.



viernes, 9 de noviembre de 2018

La tercera..., ¿la "vencida"?

Tras el empate con "gusto a poco", por el buen rendimiento del equipo, en especial en el segundo tiempo, y fundamentalmente, por la igualdad más que agónica de los locales, 30 segundos antes del pitazo final del árbitro del encuentro, el Gallo procurará "cambiar el chip" de los dos puntos que se "escurrieran" injustamente en el descuento, frente al "Lobo" jujeño, para ganar su segundo encuentro en el campeonato, cuando este mismo sábado, a partir de las 14, el conjunto de Alejandro Méndez y Walter Pico reciba en el Nuevo Francisco Urbano a Ramón Santamarina de Tandil, con el arbitraje de Bruno Bocca, y secundado por Ernesto Callegari y Nadia Chiariotti, como asistentes uno y dos, respectivamente, sin televisación de aire, en el marco de la décima fecha del Torneo de la Primera "B" Nacional, temporada 2018/2019.

Con la urgencia de sumar de a tres, luego de dos partidos, desde la asunción de la nueva dupla técnica, frente a Defensores de Belgrano y Gimnasia y Esgrima de Jujuy, en los que el Deportivo Morón mereciera más que las sendas igualdades consecutivas, el Gallo se halla concentrado en el "Centro de Formación Gabriel Calderón", en Mariano Acosta, con la incógnita de Nicolás Ramírez, sin dudas la figura del equipo y el jugador más desequilibrante del Gallo, quien hiciera trabajos diferenciados en la semana, por una dolencia física, lo cual abre un enorme y preocupante signo de interrogación, respecto de su inclusión en el once para recibir a Santamarina.

Dentro de un plantel que, nuevamente, al igual que la temporada anterior, sufriera de un indeseado e inoportuno "mal de ausencias", con la sumatoria de bajas obligadas, que semana a semana se van incrementando, en esta oportunidad, habrá que agregarle a Agustín Lavezzi, quien debutara en el segundo tiempo del empate en Jujuy, y diera señales más que positivas en el juego, pero lamentablemente se resintiera, razón por la cual quedara marginado de los 19 concentrados en "Calderón", y cuyo lugar fuera ocupado por el juvenil, Mauro Frías, delantero categoría '97, que llegara de las inferiores de Almagro y hace tan sólo unos días, tuviera minutos en la victoria amistosa internacional, de la Tercera del Deportivo Morón, frente al Sub 20 de Gremio de Porto Alegre, en el Nuevo Francisco Urbano.

Así las cosas, con las ausencias confirmadas de Gastón González (con un traumatismo de tórax, desde el cotejo ante Arsenal), Sebastián Martínez, Facundo Pumpido y Nisim Vergara, ya marginados del viaje a San Salvador de Jujuy, afectados de diferentes lesiones en sus rodillas y, como quedara dicho, la baja reciente de Agustín Lavezzi, la ofensiva del Deportivo Morón prácticamente no tendrá variantes en el banco, más allá de los puntas en cancha, y eventualmente el ingreso del juvenil Mauro Frías entre los "18".

Entre las "buenas", se puede anunciar la vuelta de Gerardo Martínez, también ausente con el "Lobo" jujeño, cuyo dorsal dependerá de la evolución de Nicolás Ramírez, para saber si su retorno será entre los "11" o  los relevos.

En consecuencia, un Gallo que precisa alcanzar su primera victoria en la "era Méndez-Pico", este sábado desde las 14, en el Oeste, procurará continuar con el "proceso de mejora continua" en el juego, consolidándolo con la mayor tranquilidad que pudiese seguramente ofrecer, un necesario triunfo ante Ramón Santamarina de Tandil, que cuenta con nueve puntos (uno más que Morón) y proviene de vencer de local, 2 a 0 a Chacarita, el lunes último.

Que la tercera sea la "vencida".



@elgallogustavo.



domingo, 4 de noviembre de 2018

La fatídica relación con los "descuentos", en otro capítulo

Y en la "ultima bola" de la tarde, en San Salvador de Jujuy, al Deportivo Morón se le "escapó" un triunfo histórico, por lo menos, hasta los '49 del segundo tiempo, en que Ignacio Bailone le bajara la pelota de cabeza a Sebastián Sánchez (el segundo marcador central, "estacionado" desde hacía minutos como punta, en búsqueda de la "heroica"), quien ingresando solo por derecha "fusilaría" a Bruno Galván, con un remate alto y seco, para empatar en uno, lo que era victoria del Gallo, apenas segundos antes del pitazo final de Rey Hilfer.

Ya en una jugada previa, también en el descuento, el mismo Bruno Galván había "sostenido" el triunfo parcial de la visita, con una atajada fenomenal ante Agustín Sufi, arrojándose hacia atrás, en una reacción y gesto técnicos para destacar, cuando el delantero sustituto del "Lobo" jujeño, impulsara una pelota con destino de gol, sorprendiendo de igual manera por la banda diestra del ataque local, que sólo los reflejos de Galván habrían de evitar su contacto con la red.

Antes de ello, y de la relación siempre fatídica del Deportivo Morón con los "descuentos" (a nivel histórico, no por lo visto en el presente torneo), el equipo de Alejandro Méndez y Walter Pico había consumado un buen partido, con especial hincapié en el segundo tiempo, donde apretaría al local contra su arco, generando la situación del gol de Cristian Lillo, y algunas otras más, además de justificar la ventaja parcial en el desarrollo, "maniatando" en el medio al buen equipo jujeño, manejándole pelota y trámite, sin pasar sobresaltos en su última línea, tal vez en uno de los partidos más "tranquilos" para Galván y la defensa del Gallo, claro está, hasta  el cuarto minuto adicionado, en que "pagaría" demasiado caro, una de las contadas distracciones en todo el cotejo.

Con varias ausencias obligadas, dadas las bajas por lesión de Sebastián Martínez, Nisim Vergara y Facundo Pumpido, sumadas a la falta de Gerardo Martínez por motivos particulares (su paternidad inminente), el Gallito volaría "remendado" hasta San Salvador de Jujuy, con los "debuts" en el banco de los juveniles, Matías Guayaré e Iván Alvarez, y la primera convocatoria entre los suplentes de Luciano Lapetina, quien finalmente habría de vivir su "estreno" oficial con la camiseta del Deportivo Morón, al igual que sucediera con Agustín Lavezzi, ambos ingresados en el complemento.

Asimismo, con Damián Akerman con la "nueve" en la espalda, luego de largo tiempo y el regreso de Franco Racca, de muy buen partido, en su festejado regreso, en los '45 iniciales el partido transitaría entre la monotonía y el "bostezo", entre un local incapaz de generar peligro, más allá de alguna pelota parada, y un Morón que desde el inicio controlaría las acciones, pero por aquél entonces, sin animarse a buscar con decisión el arco contrario, casi como en un "round de estudio", si nos remitiéramos al boxeo.

En el complemento, el equipo de la "dupla" asumiría el riesgo de buscar el triunfo, presionando bien arriba a un sorprendido Gimnasia y Esgrima, generándole un par de oportunidades claras de gol, antes del desnivel transitorio y volcando virtualmente el juego en terreno jujeño, manejando trámite y pelota, además de mantener bien controlados a los puntas locales.

Así las cosas, a los '25 de la etapa final, y cuando el dominio del Deportivo Morón se había transformado en "monólogo", de un tiro de esquina ejecutado por Nicolás Ramírez, desde la derecha del ataque, un rechazo a medias en el centro del área, le dejaría el balón justo para el remate de primera, de Cristian Lillo, que el "jugador de los goles importantes", ahora con mayor continuidad, ensayaría una volea precisa y "preciosa" sobre el sector opuesto, para vencer las manos de Carlos De Giorgi y establecer el merecido uno a cero para Morón.

En los minutos siguientes, la visita no se retrasaría más de la cuenta y seguiría dominando a un "Lobo" jujeño, que basaría su búsqueda en el empuje sin profundidad, siempre bien controlado por un mediocampo eficaz y una defensa ordenada, en el contexto de un Deportivo Morón ya de muy buen segundo tiempo, y con los méritos acumulados suficientes para justificar la victoria parcial.

Sin embargo, a este Gallo al que todo le cuesta tanto, y que registra un sólo triunfo en el campeonato, el buen partido en Jujuy y los merecimientos para ganar el mismo, de poco servirían para darle valor a un punto que, de habernos sugerido la posibilidad de refrendarlo en la previa, más de uno de nosotros lo hubiese hecho con ambas manos.

Y es que Morón debió ganar, y estuvo a segundos de hacerlo y de traerse tres puntos históricos desde San Salvador, hasta que en el "tiro del final", el "Lobo" aprovechara una de los pocas distracciones del mejor rendimiento del fondo visitante, en lo que va del torneo, para "romperle" el arco a Bruno Galván, quien en la anterior se había vuelto a "vestir" de héroe", pero que en la última del partido, a los '49 del segundo tiempo, nada podría hacer ante la volea "furiosa", de un Sebastián Sánchez travestido de delantero, a pesar de tener la "6" en la espalda.

Y así el empate final en uno, resultaría un "castigo" excesivo para el Deportivo Morón, que dentro de la cancha habría de agarrársela con Rey Hilfer, árbitro del partido (por el descuento desmedido), porque a la "liga" o la "suerte" o la ausencia de ambas, resulta imposible de "rezongarles" frente a frente (más allá de las responsabilidades propias, que las hubo, puesto que de otro modo se hubiese consumado el triunfo). 

A pensar en Santamarina, "masticando" bronca por la histórica relación fatídica entre el Gallo y los "tiempos agregados" y su nuevo "capítulo".

Otra no queda.



@elgallogustavo.



sábado, 3 de noviembre de 2018

"Prueba de carácter", ante el "Lobo" jujeño

Luego del "estreno" con empate a uno, de la dupla técnica conformada por Alejandro Julián Méndez y Walter Reinaldo Pico, del último lunes en el Nuevo Francisco Urbano, frente a Defensores de Belgrano, que dejara un gran primer tiempo del equipo, con una justa ventaja parcial, y un complemento donde la merma física del Gallito, posibilitaría el crecimiento visitante, hasta tornar en merecido el 1  a 1 final, este domingo a partir de las 17, el Deportivo Morón tendrá una "prueba de fuego", cuando deba visitar a Gimnasia y Esgrima de Jujuy, en el "Estadio 23 de Agosto", con el arbitraje de Leandro Rey Hilfer, secundado por Gerardo Lencina y Christian Martínez Cuenca, como asistentes uno y dos, respectivamente, en cotejo correspondiente a la novena fecha del Torneo de la Primera "B" Nacional, temporada 2018/2019, sin televisación de aire.

Con la baja obligada del juvenil Nisim Vergara, quien ingresara en el segundo tiempo con "Defe", pero el pasado jueves, en el Oeste, debiera retirarse lesionado del encuentro amistoso entre la Reserva del Gallo y un combinado Sub 20 de Gremio de Porto Alegre, a causa de una dolencia ligamentaria en su rodilla derecha, que se suma a la de Gastón González, por segundo partido consecutivo (tras el traumatismo de tórax que sufriera ante Arsenal), la dupla Méndez-Pico tiene algunas dudas respecto del once inicial a "parar" en Jujuy, fundamentalmente, por el problema físico que sufre Facundo Pumpido, con líquido en una de sus rodillas y el bajo nivel que viene exhibiendo Sebastián Martínez en la zaga (más alguna molestia de arrastre), ambos también ausentes con el "Lobo" norteño.

A todos ellos, debe sumársele la ausencia de Gerardo Martínez, por motivos particulares (será papá por estas horas), lo que determinara la primera convocatoria entre los suplentes, de Luciano Lapetina, el joven lateral zurdo rosarino, proveniente de la Reserva de Godoy Cruz de Mendoza, de buen rendimiento en Tercera (incluso convirtió un gol, ante Arsenal en el Oeste), tanto como marcador de punta, como volante externo por izquierda.

Lo que sí está confirmado, es la convocatoria de dos valores juveniles, que "debutarán" en el banco de los suplentes ante el "Lobo" jujeño: se trata de Iván "Pachu" Alvarez y de Matías Guayaré, el primero, volante creativo con características similares a las de Gerardo Martínez, y el segundo, mediocampista de contención, ambos de buenas actuaciones en Reserva y a quienes Alejandro Méndez, conoce perfectamente, de su paso reciente como coordinador general de las inferiores.

Así las cosas, con la sospecha de un par de cambios nominales, entre los once de arranque, pero no respecto del sistema táctico utilizado ante el "Dragón", y que tan buenas sensaciones generara en el primer tiempo y hasta el cuarto de hora inicial del complemento (el 4-2-3-1, con el "trío virtuoso" de Pardo-Ramírez-Mendieta, por delante del doble cinco y detrás de la referencia de área), el Deportivo Morón buscará sumar en su "excursión jujeña", para consolidar ideas y sistemas de juego, pero fundamentalmente, retemplar el ánimo de conjunto, dentro y fuera de la cancha, sumando puntos que tranquilicen y permitan alejarse del descenso, para recién luego, volver a soñar con objetivos e ilusiones que se fueran desvaneciendo con el correr de los partidos y las "crisis" que soportara el Gallo en los últimos tiempos.


A Jujuy, por una auténtica "prueba de carácter", ante el "Lobo" norteño.




@elgallogustavo.