Morón regresaba al Nuevo Francisco Urbano, con la posibilidad de aprovechar el "viento de cola", que significara su clasificación a 16avos. de final de Copa Argentina, en la semana, frente a Aldosivi, tanto para retemplar su alicaído frente futbolístico, en el torneo de la "B" Metro, así como para generar algún tipo de recurso económico que, en lo inmediato, permita alentar la posibilidad de apaciguar por lo menos en parte, una repetida historia de planteles y cuerpos técnicos en mora, acuciados por las penurias propias de cualquier asalariado que no puede percibir su sueldo.
En otro día y horario inconveniente para cualquier socio que trabaje, en relación de dependencia o por su cuenta, algo ignorado reiteradamente por los organismos de seguridad deportiva y sus burócratas de turno, el Gallo volvía al Oeste para recibir al siempre difícil San Telmo, del "Pato" Jorge Franzoni, que antes del primer minuto de juego y cuando recién el público asistente comenzaba a acomodarse en sus asientos, alcanzaría la primera ventaja en el partido, luego de sacar del medio y tras un par de toques habilitar en profundidad al nueve "Candombero", Ricardo Segundo, quien luego del rebote en Milton Alvarez sacudiría la red local por vez primera.
Tras el "baldazo de agua fría", el equipo de Walter Otta tardaría en acomodarse en el encuentro, profundizando su "modorra" defensiva, al punto que cada contra visitante parecía encaminada a conseguir el segundo, en el prólogo de un primer tiempo para el olvido de toda la última línea de Morón.
Sin embargo a los '10, y cuando el Gallo apenas había insinuado un leve despertar, mediante un buen remate del "Rengo" Díaz, de un tiro de esquina protagonizado por el mismo "siete bravo" del Gallito, Junior Leandro Mendieta habría de anticipar a todos, ingresando por el punto del penal, para "empalmar" el empate y un poco de tranquilidad a la sorprendida parcialidad local.
Aunque no por mucho tiempo, ya que a los trece, y en una decisión tan dudosa como apresurada, Damián Rubino, debutante árbitro del cotejo, sancionaría con penal un aparente "agarrón" en el área, de otro debutante en la tarde de lunes de Morón, como Agustín Onofrio (de correcto y promisorio rendimiento, mientras estuvo en cancha), que Milton Alvarez, para no ser menos que Nicolás Angellotti, el "héroe" frente Aldosivi, rechazaría sobre su poste derecho, al mismo Ricardo Segundo, autor del primer gol y quien habría de reivindicarse, sólo en cuestión de minutos.
En un primer tiempo "frenético" en emociones, más por los errores defensivos de ambos, que por aciertos colectivos, sobre los '27 y luego de un centro largo desde la derecha, otra vez, Ricardo Segundo, habría de ganar con llamativa comodidad en el área de Morón, para someter por segunda vez consecutiva a un Milton Alvarez, que buscaba respuestas en el semblante de sus compañeros, para explicar tanta "siesta" repetida de su última línea.
Por fortuna, sólo cinco minutos más tarde, Matías "Pichín" Pardo habría de elaborar una gran jugada en el área chica visitante, para luego de eludir "muñecos" vestidos de azul y celeste, habilitar a Rodrigo Díaz quien, preciso centro mediante, permitiría el regreso al gol de Javier Nicolás Rossi, la figura del partido, dentro de un Morón con varios puntos altos, siempre de tres cuartos en adelante.
De allí y hasta el final de la etapa, con opciones de desnivel en ambos lados, en tiempo cumplido y en una acción tan violenta como innecesaria, Nahuel Oviedo, el hábil volante creativo de "Telmo", habría de propinarle una "murra" descomunal al pobre de Maximiliano Jerez, para dejar a la visita con diez y aumentar las expectativas de un complemento más favorable y con menos zozobras.
Con Cristian Román Yassogna en lugar de Onofrio, Walter Otta intentaría sacar rápido rédito del hombre de más en cancha, cosa que conseguiría a los '8 del segundo tiempo, luego de otro córner bien ejecutado por el "Rengo" Díaz (de buen partido, mientras tuvo "aire"), para que apareciera nuevamente el "Bicho" Rossi, para "romper" la defensa "Candombera" por el centro y de cabeza, adelantar a Morón por primera vez en el encuentro.
Con una mejorada versión de Damián Ezequiel Toledo, como primera opción de pase, por delante de la defensa del Gallo, un Pardo encarador y desequilibrante, y el notable cotejo de Javier Rossi, el Deportivo Morón contaría con varias ocasiones para definir el partido con mayor holgura, aunque también sufriría innecesariamente en defensa, aún con un hombre de más, debido a la tarde para el olvido de los cuatro del fondo local, a excepción de Alvarez.
Con el pitazo final de Rubino, los abrazos de los jugadores del final, conservarían bastante de carga simbólica, de un plantel que, al igual que sus predecesores, comienza a hacerse fuerte en la adversidad, reclamando desde la dignidad de su juego y su sacrificio dentro del campo, la contrapartida del cumplimiento en el pago de sus haberes atrasados, por parte de una dirigencia que vuelve a cometer el mismo error, de prometer lo que no puede cumplir y luego, excusas repetidas de por medio, generar una situación de desgaste progresivo y esmerilamiento de la necesaria relación de confianza mutua, entre unos y otros.
Ganó Morón y da pelea en ambos "frentes"..., ¿el torneo y la "copa"?... No, el interno y el externo..., más allá de la línea de cal.
Gustavo Adrián Requelme.
@elgallogustavo.
Foto: exclusiva, Osvaldo Abades (h).
Foto: gentileza, Vanesa Insfran.
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