Y por esas extrañas vueltas del
destino, al Gallo le toca afrontar el partido más esperado del calendario,
frente a su clásico rival de La Matanza, estrenando liderazgo en soledad del
torneo, luego de haber vencido agónica, pero merecidamente a San Telmo, hace
una semana, en el Nuevo Francisco Urbano.
En efecto, este martes desde las
17.05, el Deportivo Morón de Walter Nicolás Otta, único líder del certamen,
deberá visitar a Almirante Brown, en el “Coliseo” de Mitre y Puccini, en
Campana, “hogar” de Villa Dálmine (algo así como la “segunda casa” del propio
entrenador del Gallo), hacia donde la burocracia política y administrativa de
APreViDe obligó a trasladar el encuentro, que debió haberse disputado aún a
puertas cerradas, como además habrá de jugarse, pero en el “Fragata Presidente
Sarmiento” de Isidro Casanova.
Con el arbitraje de Yamil Possi
(con Adrián Delbarba y Gustavo Apaza, como asistentes uno y dos,
respectivamente) y la televisación de TyC Sports, el Gallo intentará
consolidarse en la cima del campeonato, nada menos que ante su eterno rival
interdistrital, defendiendo a la vez un invicto de trece fechas, tanto es así
que este conjunto del Deportivo Morón, que fue creciendo y robusteciéndose en
su rendimiento, jornada tras jornada, no pierde desde la segunda fecha, ante
Estudiantes de Buenos Aires, en Caseros, luego de un comienzo inesperadamente
errático, de dos derrotas en igual cantidad de presentaciones, con Tristán Suárez
en la fecha inaugural, en el Oeste y luego frente al “Pincha”, para de allí en
adelante no caer nunca más.
Con la ausencia repetida de
Damián Akerman, recuperándose en un desgarro en la zona pubiana y de Franco
Racca en defensa, también desgarrado y en proceso de recuperación, Walter Otta
deberá decidir si repite equipo o, por ejemplo, se inclina por el regreso desde
el comienzo de Emmanuel Giménez, para dotar de mayor marca y contención a un
mediocampo de mucho juego y buen pie, pero que habrá de enfrentarse a un
Almirante de Alberto “Beto” Pascutti en la “cuerda floja”, que necesita de
algunos buenos resultados y rendimientos para mejorar su actual pálida imagen y
conservar una mínima chance de clasificar a la próxima Copa Argentina, a tres
fechas para el cierre de la primera rueda y la llegada del receso estival.
Con una oportunidad inmejorable
para consolidarse en el liderazgo del campeonato y, de paso, anotarse una de
esas victorias que se festejan todo el año, ante el clásico rival, el Deportivo
Morón ya se halla concentrado en el “Hotel Plaza” de Campana, a la espera de
uno de esos cotejos que invariablemente marca el destino inmediato de cada uno
de los adversarios históricos, por el valor anímico y emocional que encierran
triunfos de estas características tan especiales.
En Campana, y ante Almirante Brown, el
Gallito busca hacer “sonar” a su antagonista de siempre, a puertas cerradas,
pero a “corazón abierto”.
@elgallogustavo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario