jueves, 22 de noviembre de 2018

La decisión más dolorosa...

En las últimas horas, y en virtud de la falta de respuestas serias y concretas, de parte de las autoridades del club, respecto de la mora en el pago de sus haberes de octubre, los empleados de la institución, autoconvocados en Asamblea de trabajadores, decidieron con infinita pena, tomar la decisión más dolorosa, pero insoslayable a la fecha, desgastados por las falsas promesas repetidas y agotados de padecer situaciones tan injustas como ingratas, puertas adentro de sus propios hogares, ante la falta de pago de sus sueldos, compromiso legal y obligación moral de un club, que aparece como insensible y falto de la más elemental empatía, frente a la necesidad y el reclamo justificado del otro, del par que nos abre la puerta todos los días del año, y hace de la institución un ámbito "amigable" y "vivible": en efecto, el próximo lunes 26 de noviembre, los empleados del Deportivo Morón irán al paro, con el consecuente acompañamiento de UTEDyC, vía carta documento de intimación de pago en el plazo más perentorio posible, la notificación de la medida de fuerza en plenario y la correspondiente denuncia de la actual situación ante el Ministerio de Trabajo.

Demás está decir, que este cese de tareas, resuelto por los empleados del club para el lunes 26 de noviembre, constituye el último y lamentable episodio de una situación de inaudita postergación salarial, sólo sostenida y soportada por sus protagonistas, única y exclusivamente a partir del sentido de pertenencia que unánime y unívocamente siente por el club, puesto que sólo desde ese lugar, de hinchas del Deportivo Morón, más allá del rol de trabajadores. puede comprenderse que hayan podido llegar al día de hoy, sin haber dispuesto una medida similar en el pasado reciente, incluso negándose a prestar servicios durante un partido oficial, con el consecuente perjuicio deportivo que ello hubiese traído aparejado, pese a la legitimidad sin discusión del reclamo que la determinara.

Y es que, si por estas horas los trabajadores del club, a quienes todos conocemos y los saludamos con afecto, cada vez que frecuentamos nuestra "segunda casa", en tanto hinchas, socios y en último término, también empleados asalariados, según convenio sectorial, han decidido recién ahora tomar una medida de fuerza, revela por sí solo que únicamente el amor incondicional por el Deportivo Morón, los pudo hacer soportar hasta acá, situaciones indignas dentro y fuera del ámbito laboral, que no es otro que el objeto de su pasión, al igual que para el resto de todos nosotros.

Y es allí también, donde lamentablemente, la dirigencia habría de posicionarse para utilizar y valerse de esa condición de amor, no por el ámbito laboral, sino por el club objeto de su pasión y del que participan de diferentes maneras, muchos de ellos activamente a través de peñas y filiales, para "mandar a la cola" de los reclamos, las necesidades urgentes de los empleados que menos ganan en la institución (en comparación con otros "asalariados") y someterlos a situaciones de indignidad gratuitas y sin sentido, a pesar de jamás abandonar sus puestos de trabajo, ni negar colaboración alguna, anteponiendo a Morón, incluso por encima de sus demandas familiares y penurias personales.

Porque, en definitiva, para los empleados del Deportivo Morón, la resolución tomada en la fecha, de ir al paro el próximo lunes 26 del corriente, constituye una "puñalada" al propio corazón, con la tristeza infinita de sentir en el fuero más íntimo, y más allá de la racionalidad y legitimidad de demanda y medida de fuerza, que la carta documento en ciernes, se la estuviesen enviando a alguno de sus afectos más entrañables, casi tanto como si intimasen legalmente a un padre o un hijo.

Propio de un club en indisimulable crisis. De un Deportivo Morón que, institucionalmente, genera preocupación, dolor e impotencia.



@elgallogustavo.



No hay comentarios:

Publicar un comentario