domingo, 15 de abril de 2012

El Gallo se trajo un punto de Jáuregui, tras las derrotas y el tornado.

Luego de tres derrotas consecutivas (0-1 con Brown de Adrogué en el “Estadio 20 de octubre” de Tristán Suárez, 1-2 frente a Estudiantes de Buenos Aires en el Francisco Urbano y 1-3 ante Los Andes en el “Eduardo Gallardón”), un feroz tornado que provocó cuantiosas pérdidas materiales y la aceleración del certificado de defunción de un abandonado Urbano, y la consecuente postergación del encuentro con Acassuso, aún sin fecha confirmada de disputa, el Gallo viajó esta mañana bien temprano, con destino a Jáuregui, para toparse con Flandria en el “Carlos V”, en un día y horario más propio para la picada previa al asado o los mates tardíos con bizcochos, que hoy por hoy duelen en el bolsillo más o menos lo mismo: domingo a las 11.

Y de dicha visita se trajo finalmente un importante punto para engrosar su flaco promedio, máxime si tenemos en consideración que, a menos de diez minutos para el final del encuentro, el Deportivo Morón perdía por 2 a 1 y con un hombre menos, por la expulsión del volante Cristian Oscar Ortíz, hasta la aparición goleadora de otro Cristian, en esta ocasión, Leandro González, quien con una certera intervención, tras habilitación de Gerardo Daniel Martínez, colocara la placa definitiva del cotejo (válido por la 36° fecha del torneo de la “B” Metro, temporada 2011/2012), con una impensada igualdad 2 a 2, que hasta ese entonces por Villa Flandria ya se festejaba como un victoria.

En un partido cambiante y por momentos entretenido, más por los defectos evidenciados por ambos, que por sus virtudes, el Gallo comenzó ganando el partido, gracias a la tempranera ventaja conseguida por Gastón Ada, antes del primer cuarto de hora del encuentro. A partir de allí, a este Morón que le cuesta tanto conseguir la ventaja, como luego mantenerla, no extrañó que el local le empatara sobre el mismo epílogo del primer tiempo y más tarde, a los '14 de la etapa complementaria lo pasara a ganar, mediante los tantos anotados, primero por Lucas Montero y luego a través de Pablo Sebastián Bueno, ambos merced a un mismo recurso, jamás resuelto por la permeable defensa visitante: el cabezazo ofensivo.

Sin embargo, cuando Flandria diera vuelta el encuentro y más tarde se retirara expulsado Cristian Oscar Ortíz, por un supuesto manotazo en perjuicio del enganche “Canario”, Abel Sandoval, a instancias de un siempre dudoso árbitro del cotejo, Eduardo Ramón Gutiérrez, el mediodía en el “Carlos V” parecía presagiar una historia conocida y repetida hasta el hartazgo durante la presente temporada: una nueva derrota del Gallo, en el mejor de los casos sin nuevos goles en contra.

Pero para sorpresa de propios y en especial de extraños, un Gallito en inferioridad numérica y abajo en el marcador, lejos de resignarse y esperar apretado contra Alejandro Esteban Migliardi el pitazo final, se animó a buscar el empate con más voluntad que fútbol, alcanzando su premio a los '82, por intermedio de Cristian Leandro González, para retirarse de territorio “Canario” volviendo a sumar, aunque sea de a uno, y que bien pudieron ser tres, de haber tenido mejor suerte y puntería nuestro goleador histórico, Damián Emilio Akerman.

En definitiva, de su excursión mañanera de domingo a Jáuregui, el Deportivo Morón se trajo un punto, para sumar 32 en el campeonato con un partido postergado (ubicándose 19°, superando sólo a Tristán Suárez con idéntico puntaje, pero peor diferencia de gol y al colista General Lamadrid, que reúne 27 puntos) y fundamentalmente cortar la “hemorragia” de tres derrotas en fila. Sin embargo, este Morón que le lleva 10 unidades de distancia a San Telmo, hoy en Promoción, a falta de 21 puntos en juego (producto de las seis fechas restantes y el cotejo postergado frente a “Susso”), suma ya seis encuentros sin alegrías (agregados los empates en uno ante Deportivo Armenio, en Ingeniero Maschwitz y Barracas Central, en el Urbano) y lo que es peor, aún no consigue ganar lejos de casa, tras 18 partidos y diez meses y once días, desde aquella lejana tarde de viernes del 3 de junio de 2011, cuando con goles de Diego Alfonso Barrios Suárez y Damián Emilio Akerman, y por la fecha 42° de la temporada 2010/2011, se lo diera vuelta al “Dragón”, en el “Estadio Juan Pascuale”, para clasificar agónicamente el Reducido del anterior torneo.


Cristian González, el defensor goleador del Gallito.

No hay comentarios:

Publicar un comentario