martes, 21 de junio de 2016

Alberto Meyer se reunió con Juan Manuel Lugones

Este martes por la mañana, en La Plata, el presidente del Club Deportivo Morón, Alberto Meyer, acompañado del vicepresidente 1° de la institución, Leandro Sauk, así como del secretario del club, Dr. Fidel Manisse, del protesorero, Luciano Guaglianone y del jefe de seguridad, Sergio Ostrowsky, fueron recibidos por el secretario ejecutivo de la Agencia de Prevención de la Violencia en el Deporte (APreViDe), Juan Manuel Lugones, en procura de establecer pautas de trabajo conjuntas y de colaboración mutuas, a fin de regularizar la asistencia de público en general, en el Nuevo Francisco Urbano y, en definitiva, asumir un compromiso recíproco de colaboración entre club y organismo de seguridad deportiva, que garantice en el menor tiempo posible, el regreso pleno de la familia moronense a nuestro estadio.


MORON SOMOS TODOS.


Fuente: Departamento de Prensa y Comunicación, Club Deportivo Morón.



                                        Foto: www.aprevide.gba.gov.ar

                     

lunes, 13 de junio de 2016

Que el próximo festejo sea el nuestro...

Y Morón cerró el "Torneo de Transición 2016" de la Primera "B", tal vez de la manera más injusta, por una derrota en la jornada final, en su visita a Barracas Central, que nada tiene que ver con una cuarta posición muy meritoria, en atención a todos los avatares y contratiempos extra futbolísticos que plantel y cuerpo técnico debieran afrontar durante el último semestre.

En otro torneo de "Cenicientas", donde el único premio mayor se lo llevaría el humilde Flandria, conformado para engrosar su promedio y salvarse de un pronto retorno a la "C" y, en su defecto, al cabo de diecinueve fechas de un certamen mediocre y parejo hacia bajo, habría de alzarse con el ascenso a la "B" Nacional, clausurándole el "Griffo" de la ilusión a Atlanta, en su propia casa.

Con el regreso de su "Excursio", luego de largo tiempo, y el descenso de Deportivo Armenio, en la próxima temporada, a disputarse hacia principios de agosto, toda vez que para aquella época aún subsista la AFA o alguna clase de nucleamiento de clubes que la reemplace en los hechos, el Gallo habrá de cambiar los viajes a Ingeniero Maschwitz, para pisar por pimera vez el césped sintético del otro equipo del Bajo, que viene a reeditar viejos clásicos con Defensores de Belgrano.

En el balance de una temporada con demasiados problemas fuera de la cancha, y que sin embargo rindió hasta más de lo esperado en la previa y, de yapa, a poco estuvo de meterse en la pelea por el campeonato hasta la última fecha, el Morón de Walter Otta alternó buenas y malas, pero lo cierto es que se caracterizó por intentar imponer una propuesta generosa e interesante, y hasta desusada para la categoría, donde pretendiera con variado éxito, asumir el rol de protagonista en  todos los escenarios, con una clara predisposición y ambición ofensivas, lo que a veces lo llevara a desbalancearse en su última línea.

Con el goleador del campeonato en Javier Rossi (algo que no ocurría desde las épocas de Juan Ramón Corona y antes, de Atilio Romagnoli en la "C", en 1980), el buen torneo de Junior Mendieta, ya rumbo a Lanús, su nuevo club desde diciembre de 2015, y la generación de juego de un doble enganche (Gerardo Martínez y Rodrigo Díaz) que, gustos tácticos al margen, resultara un deleite para el maltratado ojo del hincha del Gallo, y del fútbol de ascenso en general, el Deportivo Morón finalizaría el certamen con una interesante cifra de 26 goles en 19 partidos, igualada por Colegiales (tercero por diferencia de gol) y sólo superada por Atlanta, con 28 tantos, lo que revela el "poder de fuego" que tuviera el equipo, más allá de algunos momentos de "sequía", lógicos en el transcurso de cualquier competencia.

De allí en adelante, o mejor dicho, hacia "atrás", comenzarían los mayores desacoples de conjunto, con un mediocampo que destacaría la figura excluyente de un volante central de otra categoría, como Emmanuel Giménez, no siempre bien secundado por la irregularidad de Damián Toledo (quien pareciera haber pagado caro y prolongado "tributo" a la grave lesión ligamentaria en una de sus rodillas) y un Cristian Yassogna que comenzara con el nivel del campeonato pasado y, de unas cuantas fechas a esta parte, finalizara exhibiendo una imagen alejada de aquél jugador "todo terreno" y abanderado del sacrificio, la prodigalidad y la solidaridad dentro de la cancha. 

Padeciendo demasiado, otra vez, en general, la ausencia absoluta de carrileros naturales, algo que se viene arrastrando desde los desatinos en la conformación del plantel, en tiempos de Salvador Pasini, quien con su idea de jugar con tres volantes centrales y ningún externo, condicionara desde entonces la conformación de los planteles futuros, a caballo de una situación económica que impediría grandes erogaciones en épocas de Blas Giunta y en la llegada reciente de Walter Otta.

Ya en campo propio, el arco de Morón estaría muy bien cubierto, con el correcto rendimiento de Milton Alvarez, quien más allá de algún error aislado o falsa actuación, le devolvió al equipo las garantías perdidas bajo los tres palos, desde las mejores épocas de "Chiche" Migliardi, o el primer torneo del "Flaco" Peratta, tras su agridulce regreso al Gallo.

Hasta arribar a la defensa, sin dudas el "talón de Aquiles" de este conjunto, con actuaciones individuales muy desparejas, pero fundamentalmente sin haberse hallado jamás un rendimiento colectivo convincente, claramente reflejado en los diecinueve goles en contra, soportados en igual cantidad de encuentros, cuando en comparación, el campeón Flandria, hubo de recibir tan solo nueve tantos, con Leonardo Griffo en su arco.

Inmejorable lo del capitán Emiliano Mayola, importante lo demostrado por Nicolás Minici hasta su prolongada lesión, con altibajos de Cristian Broggi y Nicolás Gásperi, y un flojo torneo de Juan Gabriel Ferreira, Walter Otta no podría consolidar una última línea que transmitiera solidez, en muchas ocasiones potenciada por la recurrencia en la utilización del "achique", tal vez de discutible conveniencia, en presencia de arbitrajes tan paupérrimos como los que suelen "padecerse" en esta categoría, cada vez más lejos de una Primera "B" en serio, y cada año más cerca de una suerte de Primera "C" "premium" o de "lujo", por la existencia de grandes como Morón, Platense, Atlanta o Almirante.

En definitiva, con la derrota por dos a uno ante Barracas, en el "Claudio 'Chiqui' Tapia", el Gallo finalizaría de una manera injusta, una campeonato que hubiese merecido un cierre diferente, premio a un grupo de jugadores y cuerpo técnico que, pese a las adversidades del afuera, supieron sobreponerse para redondear una campaña destacable y con dignidad y verguenza deportiva, ganarse el respeto de la gente.

Ojalá, el campeonato venidero, con muchas continuidades y pocas incorporaciones (y buenas), logremos darle el adiós definitivo a una categoría que nos deprecia año a año y que, desde hace 16 temporadas, nos mantiene rehenes de una pesadilla en vigilia.

Y que el próximo festejo ya sea el nuestro.


Gustavo Adrián Requelme.
@elgallogustavo.



                                   Foto: gentileza, Vanesa Insfran.



                                    Foto: exclusiva, Osvaldo Abades (h).

viernes, 10 de junio de 2016

Alberto Meyer fue recibido por el intendente Tagliaferro.

Este viernes a media mañana, en el “Salón Mariano Moreno” del Palacio Municipal, el presidente del Deportivo Morón, Alberto Meyer, acompañado de casi la totalidad de sus pares de comisión directiva, fueron recibidos por el intendente de Morón, Lic. Ramiro Tagliaferro, acompañado en la ocasión por el Subsecretario Legal y Técnico, Dr. Cristian Herrera, en el marco de una amena reunión, de tono distendido, a fin de darle la bienvenida como nueva máxima autoridad de nuestra institución, “la más importante del Partido de Morón”, en opinión del responsable del ejecutivo comunal.

Luego de abordar distintas problemáticas que atañen a ambos, como por ejemplo, la inconclusa obra de traslado del Nuevo Francisco Urbano, dentro de cuyo contrato, el municipio resulta garante de la misma, tanto el Lic. Tagliaferro como Meyer coincidieron en la necesidad de retomar una relación recíproca, entre Estado comunal y Club Deportivo Morón, que transite por senderos de cooperación y acompañamiento mutuos, pero definitivamente alejados de las intromisiones municipales en los asuntos internos de nuestra institución, que caracterizara a la gestión anterior, por lo menos, hasta diciembre de 2015.





Fotos: gentileza, Vanesa Insfran, para Departamento de Prensa y Comunicación del Club Deportivo Morón.

jueves, 9 de junio de 2016

ALBERTO MEYER, ES EL NUEVO PRESIDENTE DEL DEPORTIVO MORON

Este miércoles 8 de junio por la tarde, en la confitería del club, se llevó a cabo el acto formal de traspaso de mando, de la directiva saliente, encabezada por el ex vicepresidente primero, en ejercicio de la presidencia, Dr. Pablo Sauro, y la nueva comisión directiva, elegida con casi el 48 por ciento de los votos, el último domingo 5 del corriente, y que de esta manera determinara el regreso a la presidencia del Deportivo Morón, de Alberto Rubén Meyer, quien asumirá la máxima responsabilidad institucional por quinto mandato, luego de presidir al club durante cuatro períodos consecutivos y ocho años, entre el 2002 y el 2010.

En un acto sencillo y austero, tal una de las tres consignas de campaña enarboladas por Alberto Meyer (“Orden, Austeridad y Crecimiento”, han sido desde siempre sus premisas fundacionales para este nueva etapa), y sin embargo emotivo, en una confitería del club expectante por un nuevo ciclo que se inicia en la historia de nuestro querido Gallito, Alberto Meyer y Pablo Sauro suscribieron el acta de traspaso de mando correspondiente, que da comienzo a la presidencia del primero, durante el período 2016/2018, ante los demás candidatos de la Agrupación Resurgimiento Moronense y desde este miércoles, nuevos miembros de comisión directiva por idéntico lapso, y los flashes, micrófonos y cámaras de los medios partidarios gentilmente presentes en tal histórico acontecimiento.

“Agradezco infinitamente al socio de Morón, que haya depositado su confianza en este nuevo equipo dirigencial, dentro del cual y como máximo referente del mismo, me comprometo a cumplir con la palabra dada. Es un compromiso muy difícil, pero al mismo tiempo muy hermoso, potenciado por la gran cantidad de socios que han confiado en nosotros”, afirmó Alberto Meyer, en sus primeras declaraciones como flamante presidente del Deportivo Morón.

“Morón es de todos, acá no hay vencedores ni vencidos. Por eso sabemos del compromiso asumido por las demás agrupaciones y confiamos en que nos acompañarán y ayudarán durante esta nueva gestión, en este momento tan duro que atraviesa el club”, continuó el nuevo presidente, acompañado por Pablo Sauro y con candidatos de otras fuerzas electorales, entre los presentes al acto de traspaso de mando.

“Venimos por las obras terminadas y para garantizar la gesta del traslado tal como tiene que ser, así como reclamar todo lo que nos falta, para poder contar con la totalidad de nuestro patrimonio institucional, de la manera acordada oportunamente. No será una tarea fácil, pero tenemos muchísima confianza”, sintetizó Alberto Meyer, desde el último domingo, el nuevo presidente del Deportivo Morón, tras ser elegido con casi el 48 por ciento de los votos.

Es de destacar que, en este quinto período a cargo del Gallo, Alberto Meyer estará acompañado por los siguientes miembros de comisión directiva:

Vicepresidente 1°: Leandro Sauk;
Vicepresidente 2°: Juan Carlos NIgrele;
Secretario: Fidel Manisse;
Prosecretario: Sergio Babino;
Tesorero: Silvana Reimunto;
Protesorero: Luciano Guaglianone;
Secretario de Actas: Gustavo Requelme;

Vocal Titular 1°: Juan Pablo Rochi;
Vocal Titular 2°: Luis Hernández;
Vocal Titular 3°: Daniel Santarelli;
Vocal Titular 4°: Marta Parisi;
Vocal Titular 5°: José Glusman;
Vocal Titular 6°: Germán Rivadeneira;
Vocal Titular 7°: Alejandro López;
Vocal Suplente 1°: Eduardo Suárez;
Vocal Suplente 2°: Eduardo Correa;
Vocal Suplente 3°: Omar Coda;
Vocal Suplente 4°: Mario Amalfi;
Vocal Suplente 5°: Mabel Peña;
Vocal Suplente 6°: Julio Mansilla;

Revisor de Cuentas Titular 1°: Fernando Bellido;
Revisor de Cuentas Titular 2°: Daniel Castillo;
Revisor de Cuentas Titular 3°: José Elizondo;
Revisor de Cuentas Suplente 1°: Jorge Gambin;
Revisor de Cuentas Suplente 2°: Claudio Paulluk.



                                   Foto: gentileza, Vanesa Insfran.



                                    Foto: gentileza, Osvaldo Abades (h).

miércoles, 8 de junio de 2016

"Deportivo Dignidad" y la entereza del "Bicho".

Deportivo Morón derrotó a San Carlos 1 a 0 y logró coronar la temporada como invicto de local. A pesar de no poder pelear por el torneo, los dirigidos por Otta dejaron una aceptable imagen y le regalaron a sus hinchas el triunfo. Conmovedora ovación para Javier Rossi en un momento muy doloroso.

El Gallo llegaba a la anteúltima fecha con la desazón lógica de haber quedado sin chances de ser campeón. Sin presiones y casi con el único compromiso de ganar por Rossi, jugó un "entrenamiento a puertas abiertas". Gerardo Martínez como figura y Javier Rossi como eje de todas las miradas, torcieron la balanza de un cotejo que parecía destinado a un empate sin pena ni gloria.

La gélida tarde de lunes, como tantas otras, se hacía eco del poco ambiente en las tribunas. La inmensidad del Nuevo Francisco Urbano lucía como un coloso sin alma ni vida. Y, como si el frío cemento no bastase, en el terreno de juego había un "león herido" (pero entero), llamado Rossi. La ocasión no admitía equívocos: el resultado era una anécdota, había alguien que necesitaba del calor humano. En un gesto plagado de tacto, "el Bicho" se llevó un minuto de ovación que, ante tanto dolor, llegó como un bálsamo sumamente oportuno.

El partido en sí fue un compendio de equívocos. San Carlos, de flojo torneo, apostó a defender y a la contra. Morón, casi siempre "ciego", buscó la manera de romper el marcador. Algún tiro libre ejecutado por Mendieta insinuó con romper el letargo. Finalmente, a los veintiseis minutos de la segunda mitad, llegó el centro de Martínez que interceptó Mayola con su cabeza y sentenció el asunto. San Carlos, estoico, resistió antes y después del gol para llegar a este momento. Su suerte en la tarde de ayer, como en el resto del torneo, parecía echada. El resto fue absolutamente previsible: pinceladas de Martínez, despliegue de Mendieta y un sinfín de centros para que Rossi se lleve todos los flashes. 

Llegó el pitazo final de Possi y se coronó el triunfo. Casi desde el inicio, quienes asistieron al estadio sabían que el partido estaba de más. La temporada, con muchos sinsabores, mostró a un plantel más unido que nunca y una hinchada que, a pesar de 26 años de frustraciones, se entregó por completo al amor propio brindado. A fin de cuentas, como reza la canción, "te alentaremos de corazón, PORQUE TE QUIERO Y SOY HINCHA DE MORÓN". Jugadores y cuerpo técnico, desde este humilde lugar, muchísimas gracias. 

Durante seis meses fueron "Deportivo Dignidad". Ojalá que de ahora en adelante volvamos a ser Deportivo Morón.


Matías Andrés Colinas.



                                                   Foto: gentileza, Vanesa Insfran.



                                     Foto: exclusiva, Osvaldo Abades (h).