martes, 29 de octubre de 2019

Un rendimiento "Gasolero", con "ayuda" de terceros

Por el postergado de la décima fecha de la Primera Nacional, el Deportivo Morón jamás hizo pie en su visita a Temperley, en Turdera, y cayó por un contundente 3 a 0, luego de cuatro partidos sin derrotas, en un final envuelto en polémicas y reclamos, en presencia de un arbitraje de Sebastián Zunino y su asistente número dos, Cristian Arregues, que perjudicara claramente al Gallo, con la sanción de un penal inexistente (luego contenido por Julio Salvá) y de un segundo gol local viciado de nulidad, por la evidente posición adelantada del lateral derecho, Gonzalo Asís, en la asistencia goleadora a Nicolás Messiniti, a falta de dos minutos para el cierre del encuentro y de frente a la posición de Arregues, "rompiendo" por completo el trámite abierto y el final incierto de unos '90, que aún sin jugar bien y "regalando" un tiempo, Morón pudo igualar y tuvo chances para hacerlo, hasta que "Zunino y cía" inclinaran la "balanza" en jugadas puntuales y determinantes para el resultado.

En efecto, en un primer tiempo de lo más flojo hasta el momento, el "Gasolero" manejaría el balón a voluntad, en una "réplica" de aquellos primeros '45 en Caseros, con un doble cinco del Gallo que perdería la "batalla de los medios", frente a la eficacia y criterio de Federico Fattori (a la postre, la figura de la noche) en la contención y de Lautaro Rinaldi en el primer pase ofensivo, como contrapartida a un Matías Nizzo de flojo primer tiempo y mejor complemento y un recuperado Lucas Pérez Godoy, pero lejos, muy lejos de su mejor nivel, por ejemplo, en la mencionada jornada, también con derrota, frente a Estudiantes de Buenos Aires.

Sin dominio de la pelota, el equipo de "Cacho" Sialle dependería de alguna buena combinación entre Mauricio Alonso, Nicolás Ramírez y Fabricio Alvarenga, con Esteban Ciaccheri nuevamente como única referencia de área, jugando demasiado lejos de la misma y muchas veces "aislado" de sus compañeros, en un Morón que se mostrara "partido", entre su defensa y ofensiva, sin juego ni gravitación en la zona media.

Para colmo de males, Lucas Baldunciel, pese a tener el dorsal "9" en la espalda, se recostaría sobre el costado derecho de la última línea visitante, llevándole mucho trabajo a Matías Cortave, de correcta resolución en la mayoría de los casos, hasta que sobre los '25 del primer tiempo, en una gran acción colectiva de Temperley, el citado Baldunciel desbordara a Cortave, enviara un centro a una defensa en desparejo retroceso, para que Mauro González se la bajara de pecho a Emanuel Ibañez, y el "8" del "Gasolero" ajusticiara a Julio Salvá, con un remate esquinado sobre su guante zurdo.

Con la desventaja parcial, Morón tampoco lograría hacerse de la pelota, para comenzar a "remontar la cuesta" de un desarrollo muy desfavorable, pese al empuje de Nicolás Martínez y a contar con un par de oportunidades, como aquella de Alvarenga, que solo sobre el segundo palo de Matías Fidel Castro, enviara un centro fuerte, que por poco no conectara Nizzo (por entonces, con el resultado aún en cero) y en una buena combinación entre Alonso y Ciaccheri, el uruguayo, de lo mejor del primer tiempo, ingresara por izquierda, rematando desviando sobre el palo opuesto, aunque el asistente dos, Cristian Arregues, invalidara la acción por un off side inexistente, en un "anticipo" del escandaloso final que nos depararía la noche en el "Beranger".

Ya en el complemento, "Cacho" Sialle dispondría el ingreso de Damián Akerman en lugar de Esteban Ciaccheri, adelantando a los "extremos", Alonso y Alvarenga, para acompañar a Ramírez, con el "histórico" un poco retrasado, casi como un "media punta", generando a los ocho del segundo tiempo, la jugada más clara de la visita, cuando de un despeje largo de Nizzo, de primera, con un toque de "clase" y precisión notables, Damián habilitara a "Nico" Ramírez, para que el "10" del Gallo le ganase en velocidad a su defensor y ante la salida del arquero, lo eludiera con calidad, con una gambeta sobre su perfil zurdo, y ante el arco vacío rematar desviado, de manera increíble e injusta, por la gran gestión individual y la brillante asistencia. 

En esos primeros '15 del segundo tiempo, se podría ver lo mejor de Morón en la noche de Turdera, "robándole" el balón al local y arrinconándolo en su última línea, hasta que en una contra, Mauro Cerutti se "zambullera" en el área, a escasos metros de Zunino y su asistente, Arregues, en un despeje de Valentín Perales que resultara todo "pelota", sancionando un penal insólito, que además determinara la amonestación del primer central del Gallo, por su protesta. Un par de minutos más tarde, Julio Salvá "haría justicia" y mantendría a Morón en partido, atajando en primera instancia el remate de Mauro González y en el rebote, despejara el envío "a quemarropa" de Baldunciel, que tenía más destino de "red" que el  propio penal.

Con el debut de Lucas Chacana y Agustín Lavezzi en cancha, por Alvarenga y Alonso, respectivamente, Morón intentaría "quemar la naves", aunque ya no contaría con el dominio territorial y de la pelota, de aquél primer cuarto de hora del complemento, retomando paulatinamente el "Gasolero" a su control atildado del balón, con la gran producción del Fattori, en un partido "abierto", donde pese a sus limitaciones, la voluntad del Deportivo Morón podría hallar su "premio" en cualquier momento, con un Damián Akerman asistiendo de primera, para la llegada de alguno de los tres delanteros: Ramírez, Chacana y Lavezzi.

Expuesto a la contra, a falta de dos minutos para el final del encuentro, Gonzalo Asís (el reemplazante de Enzo Baglivo, afortunadamente de alta, tras el accidente que le casi le costara la vida y provocara la lógica suspensión de este partido, el pasado lunes 21), "remontaría" su lateral diestro, combinando con el ingresado Nicolás Messiniti, para que el "18" del "Gasolero" sentenciara el resultado con el 2 a 0... Todo muy normal hasta allí, salvo que al momento de la asistencia, Asís se encontraba claramente en posición adelantada, de frente al asistente, lo que provocaría la reacción de todo Morón y en consecuencia, la expulsión de Valentín Perales.

Dos minutos más tarde, y con un Morón con diez hombres y "desencajado", por la sucesión de "yerros" decisivos en favor del local, otra vez Messiniti, en su "noche soñada", recibiría de Federico Fattori para volver a vencer a Julio Salvá, casi desde el punto del penal.

Con el 3 a 0 "rápido y furioso", la amonestación de Emiliano Mayola por protestar y el nerviosismo generalizado en la visita, el final del encuentro hallaría a los jugadores de Morón, pidiéndole explicaciones a un Sebastián Zunino con escasos partidos en la divisional, pero el suficiente "oficio" para desestabilizar y resultar determinante en momentos y acciones concretas, "equivocándose" siempre en favor de los "Celeste", esta noche ataviados de "rosa", en apoyo a la lucha contra el cáncer de mama.

En definitiva, si a Morón le cuesta todo el doble, supliendo con sacrificio y voluntad sus limitaciones, más en noches como las de Turdera, donde el rival resulta superior en los '90, la "asistencia" impensada de los árbitros, para volver a perjudicarlo, una vez más, convierte en demasiado "cuesta arriba", una faena que debería ser de "once contra once", y no de trece o catorce "locales", contra los visitantes que permite el reglamento, menos algún expulsado.

Ya que, en contrapartida, hace 34 partidos de campeonato, sin contar "Copa Argentina" (de lo contrario resultarían 35), que ninguna terna arbitral se "equivoca" en favor del Gallito, dentro del área, como para cobrarle un penal.

Y no es que vayamos por la vida pidiendo "ayuda", pero sí, cuanto menos, imparcialidad en los "pitos" y que los encuentros se diriman entre los verdaderos protagonistas, por sus aciertos o errores en el campo de juego, y no por terceros involucrados con la capacidad de cambiar el rumbo de los resultados.

A pensar en Platense, otra no queda. Mientras tanto, compartimos un hashtag, para que entre todos, podamos hacerlo "tendencia" en la AFA y el Colegio de Arbitros: #UnPenalParaMorón.

A ver qué "hombre de negro" se "anima" a cortar la "racha" y recibirse de "héroe", quizás, quién te dice..., el próximo lunes en el Oeste.



@elgallogustavo.



sábado, 26 de octubre de 2019

Nuevos valores de cuota social

En la fecha, debajo de la "Platea Filiberto Ferrante", se desarrollaron las Asamblea Ordinaria y Extraordinaria convocadas por la Comisión Directiva.

Constituida en segundo llamado, a las 20, y ante la presencia de apenas 56 socios, en primera instancia se pondría en consideración la Memoria y Balance correspondiente al ejercicio 2017/2018, el cual resultara aprobado por mayoría.

A continuación, alrededor de las 20:30 daría inicio la Asamblea Extraordinaria, a fin de considerar la adecuación de la cuota societaria, que por mayoría de los socios presentes (por entonces, unos 75) se aprobaría un aumento en dos tramos, el primero del 22 por ciento, con vigencia desde el 1° de noviembre y el restante del 8 por ciento, que regirá automáticamente a partir del 1° de febrero de 2020.

De esta manera, el cuadro de nuevos valores de cuota societaria quedaría conformado de la siguiente manera:

Nuevos valores de cuota social

                  Antes        Ahora

Popular     $ 450         $ 550

Capelli      $ 520         $ 650

Ferrante    $ 780         $ 950


Todos los valores corresponden a socios activos mayores y los nuevos montos comenzarán a regir a partir del 1° de noviembre.

Desde el 1° de febrero de 2020, a los nuevos valores aprobados se les aplicará una actualización del 8 por ciento ($ 50, en el caso del sector Popular).

Para el resto de las categorías, compartimos la infografía, gentileza de Prensa Oficial del Club Deportivo Morón.



@elgallogustavo.



lunes, 14 de octubre de 2019

Suma y sigue

En un partido de tono discreto, más "luchado" que jugado y con escasas emociones en las áreas, el Gallo y Mitre repartieron puntos y merecimientos por igual, en la tormentosa noche de Santiago del Estero, para que el equipo de "Cacho" Sialle, homenajeado en la previa del encuentro, por un público "Aurinegro" que lo tiene como auténtico "prócer" y no es para menos (lo ascendió del Federal "A" a la entonces Primera "B" Nacional, en la temporada 2016/2017), se traiga de regreso un punto importante, para continuar "metido" en zona de Reducido, en la Zona 1 de la Primera Nacional, al cabo de la novena fecha del certamen.

Tras unos primeros minutos donde la visita saldría a imponer condiciones, presionando en la salida al local y manejando el balón, aunque sin generar situaciones de riesgo, el local demoraría casi un cuarto de hora en asentarse en su propio terreno y ante su gente, para comenzar a arrimar peligro al arco defendido por Julio Salvá, con el argumento principal del pelotazo frontal al área, en ausencia de ideas en su hombres de "creación", dada la opaca noche de Diego Auzqui, para "fortuna" del Gallito.

Repitiendo el once inicial, que hace una semana derrotara a Barracas Central, en el Nuevo Francisco Urbano, nuevamente con Cristian Lillo en reemplazo de Lucas Pérez Godoy, aún en proceso de recuperación de su desgarro en el gemelo derecho, en aquella primera etapa, el Deportivo Morón contaría con un remate desde afuera, de Fabricio Alvarenga, que saliera apenas desviado sobre el palo derecho de Luis Ojeda, arquero local, y unos minutos antes, una pelota que le quedaría en "soledad", a Valentin Perales sobre el lateral zurdo del ataque del Gallo, pero su inmejorable posición, no hallaría receptores en el área chica, a la hora del centro con "olor" a gol.

Como contrapartida, Mitre sólo inquietaría con alguna pelota parada, en especial por medio de tiros de esquina, en un corto lapso de presión constante mediante centros, entre los '20 y los '35 del primer tiempo, siempre bien controlados por una defensa segura y la salida oportuna de Salvá.

Sin embargo, cuando se extinguían los '45 iniciales y en el momento en que Morón parecía sentirse más cómodo con el desarrollo del partido, sin pasar sobresaltos en su última línea, manejando la pelota en el medio, a la espera de una contra bien hilvanada, Mitre se encontraría con una ventaja impensada, nacida en un balón perdido en tres cuartos propio, por Matías Nizzo, luego mal resuelta en los intentos de cobertura, que dejarían el espacio justo para que José Luis Torres, el "11" Aurinegro, se abriera camino del medio hacia la izquierda, y sacara un remate defectuoso, pero lo suficientemente certero, para vencer la resistencia de Salvá, que creemos jugado por el remate cruzado, no tuvo reacción ante el zurdazo goleador al primer palo.

Iban '42 de un primer tiempo donde no se habían sacado ventajas, y una sucesión de errores, en un Morón hasta allí, sin fisuras, le daba la posibilidad al local de ponerse en "ganancia", en un partido que de otro modo, se encaminaba irremediablemente al descanso, con el cero a cero como único resultado posible.

En el complemento, un Mitre "revitalizado" por la ventaja fortuita, con mayor tranquilidad y paciencia, dado que le había trasladado la obligación a la visita, comenzaría a hacer circular el balón con mayor criterio, a partir del empuje de Juan Ignacio Alessandroni, desde el círculo central y el criterio de Marcos Rivadero, el volante diestro. 

Pese a ello, y a pasarla mal, en ese comienzo de segundo segmento, Morón contaría con una chance inmejorable para emparejar la "contienda", cuando esta vez, el local perdiera la pelota en sus tres cuartos, y Esteban Ciaccheri, de "arremetida", de cara al arco, adelantara la pelota en el último toque, antes de enfrentar a Ojeda, y permitiera que su defensor le quitase el "cuero".

Superado el cuarto de hora del complemento, Sialle mandaría al terreno a Ezequiel D'Angelo y Agustín Lavezzi, en lugar de Ciaccheri y Lillo, ganando en tenencia con la habilidad del ex San Telmo, pero sin generar zozobras a la última línea de un Mitre, que ahora parecía su momento para sentirse cómodo con el trámite del partido.

Tanto es así, que en una jugada polémica, el local conseguiría el segundo gol, que sería anulado por posición adelantada, a instancias del juez de línea, en una acción que dejaría muchas dudas por lo "fina" de la misma, pero que, en definitiva, tal vez resultara una suerte de "revancha" divina o "karmática", por aquella vergonzosa sanción de un off side inexistente, en este mismo escenario, que privara a Morón de un empate legítimo, en el descuento, ante el centro de Gerardo Martínez, conectado a gol por Junior Mendieta, el 10 de diciembre de 2018, "despojo" arbitrado entre Bruno Bocca y su asistente de entonces, Juan Del Fueyo.

En ese contexto, cuando el desarrollo parecía "cuesta arriba" para la visita, por la necesidad de ir en procura del empate, exponiéndose a las contras locales, la "fragilidad" y la ventajas de un rival discreto, le darían al Gallo la ocasión de "empardar" la cuenta, tal vez en el mejor momento de Mitre, a la inversa de lo que sucediera, al momento de la apertura del marcador, en favor de los santiagueños.

Así las cosas, tras la sanción de una infracción sobre el lateral derecho, casi en la misma zona en que comenzara a gestarse el gol de Mitre, Nicolás Ramírez sacaría un centro preciso y "precioso", con destino a la cabeza del capitán, Emiliano Mayola, quien ingresando solo y "descuidado" por la marca, que habría de "dormirse" una auténtica "siesta", pese a la nocturnidad con aguacero santiagueño, impulsaría el balón con su cabeza, apenas agachándose, para colocarla pegada al "caño" zurdo de un Ojeda, que sólo atinó a observar su recorrido.

Con el uno a uno, merecido en el balance general de los '90, Morón intentaría quedarse con "todo", por algunos minutos posteriores al tanto de Mayola, e inquietaría con alguna otra pelota parada, a un local aún más vulnerable, con el "cimbronazo" del empate, tras lo cual Arnaldo Sialle agotaría cambios con el ingreso de Juan Celaya por Mauricio Alonso, para evitar "sorpresas" desagradables, de allí y hasta el pitazo final de un regular Andrés Gareano.

Con un punto importante en el "bolso", por el viaje a Santiago y la contingencia de estar en desventaja, el Gallo prolongó su buen paso en el actual Torneo de la Primera Nacional, que lo mantiene en zona de Reducido, con 16 unidades en nueve cotejos.

Ahora es tiempo de pensar en Temperley, el próximo lunes 21, en el "Alfredo Beranger".

"Suma y sigue", el incómodo y eficaz equipo de "Cacho".



@elgallogustavo.



lunes, 7 de octubre de 2019

El Gallo, el más "Guapo"

Y este Deportivo Morón de "Cacho" Sialle, solidario, sacrificado, humilde, consciente de sus limitaciones y sin grandes "estridencias" individuales, pero con innegable vocación colectiva, volvió a demostrar que tiene muy claro a qué juega y cómo conseguir el mayor provecho en la "fortaleza" de conjunto, para superar a un Barracas Central con buenos argumentos nominales (como la "joya" de la categoría, el seleccionado Sub 23, Fernando "Chiche" Valenzuela), para sumar su segundo triunfo consecutivo y encaramarse en el selecto lote de los mejores cuatro de la Zona 1, que a la fecha estarían clasificando a "Copa Argentina" y al Reducido de la Primera Nacional.

Sin Lucas Pérez Godoy, baja sensible por lesión, el Gallo resignaría algo de la claridad que le otorga el ex Mitre de Santiago, para ganar en marca con el ingreso de Cristian Lillo, reeditando un "doble cinco" que se conocen de "memoria", junto a Matías Nizzo, y que tan buenos dividendos le diera al equipo, en la última temporada.

Enfrente, un "Guapo" dirigido por el inolvidable Salvador Daniele, y el "Chino" Sergio Ricardo Lara como ayudante de campo, le opondrían a Morón, un Barracas de buen pie, con individualidades interesantes, pero con la posibilidad de "explotar" los espacios que los esquemas siempre ofensivos del entrañable "Gato", tarde o temprano, le permitirían al Deportivo Morón aguardar con paciencia, los "huecos" que ningún otro visitante habría de proponer, en el Nuevo Francisco Urbano.

Así las cosas, luego de un primer cuarto de hora de "estudio", sin emociones en ninguno de los arcos, una habilitación en profundidad de Valentín Perales, entre los centrales "Barranqueños", permitiría que Esteban Ciaccheri, "guapeando" con su defensor, le cruzara el remate a Elías Gómez, para poner en ventaja al Gallito, cuando poco y nada había pasado.

Con la ventaja a su favor y los "circuitos" futbolísticos de la visita, bien controlados, en especial, la presencia siempre inquietante de Fernando Valenzuela, por izquierda ("custodiado" de cerca por Nicolás Martínez, en la tarde que cumpliera 200 partidos con la camiseta del Gallo) y Ramiro López, contenido por Cristian Lillo y Matías Nizzo, Morón no pasaría zozobras en su últimas línea y sí contaría con posibilidades para ampliar la diferencia, pero la carencia repetida para "cerrar" los partidos, mantendría con "vida" al "Guapo", hasta el pitazo final de Leandro Rey Hilfer.

En rigor de verdad, el Deportivo Morón contaría con una posibilidad inmejorable para sacar diferencia de dos, antes del cierre de primer tiempo, pero el mal estado del campo de juego, que pareciera estar aún peor que en el pasado cotejo ante San Martín de San Juan, un mal "pique" del balón, de cara al arco contrario y con pelota dominada, le impediría a Nicolás Ramírez, otra vez de gran primer tiempo y buen partido, definir ante Elías Gómez, cuando todo el Nuevo Francisco Urbano se aprestaba a gritar el segundo gol de la tarde.

El cierre de los primeros '45, justificaría la ventaja parcial del Gallo, a partir de la apertura del marcador, a cargo del Esteban Ciaccheri, con una buen trabajo de conjunto, fiel a lo que nos tiene acostumbrados, el "laborioso" equipo de Arnaldo Sialle, con puntos altos en toda la defensa, pero en particular, en Matías Cortave y Nicolás Martínez, como en Mauricio Alonso, por momentos supliendo la ausencia de Pérez Godoy, para erigirse en el primer pase ofensivo, y en la peligrosidad de Fabricio Alvarenga, menos "lagunero" que de costumbre y, a la postre, la figura del partido.

En el complemento, en menos de diez minutos, Barracas contaría con las mejores dos opciones para igualar el encuentro, encendiendo las "alarmas", en el cuerpo técnico del Gallo, puesto que Morón volvería a salir "dormido", al igual que le ocurriese frente a los sanjuaninos, pero en este caso, con la fortuna de su lado, puesto que Barracas dilapidaría ambas chances, entre la falta de puntería de sus delanteros, y una excelente respuesta de Julio Salva, abajo, sobre su poste zurdo, tras el "envenenado" remate del recién ingresado, Lucas Colitto.

Con el transcurso de los minutos, superado el primer cuarto de hora del complemento, Morón empezaría a hacer "pie" en el segundo tiempo, pese a perder por completo la tenencia del balón, propiedad exclusiva de la visita, a través de "Chiche" Valenzuela, Ramiro López, Lucas Colitto y más tarde, Sebastián Riquelme, interesante medio punta, hermano de Juan Román, de gambeta indescifrable y la categoría "genética" de la familia "Riquelme".

Con espacios cada vez más pronunciados, por la incursiones ofensivas, tanto de Clemente Rodríguez por derecha, como de Leonel Bontempo por izquierda, la "contra" del Gallo comenzaría a "esmerilar" las intenciones de la visita, aunque sin poder "liquidar" definitivamente el pleito, como en aquella "avivada" de Alvarenga, que dejaría en el camino a Bontempo y tras su centro, Esteban Ciaccheri ensayaría una "chilena" desde el punto del penal, que si hubiera terminado en el segundo gol de Morón, Rey Hilfier debería parar unos segundos la reanudación del juego, para permitir el aplauso de la gente, por la enorme jugada previa y el impecable gesto técnico del "9" de Morón.

En los instantes finales, "Cacho" Sialle mandaría al campo de juego a Dylan Glaby, en su debut con la casaca del Gallo, para que "muerda" en el medio, por Alonso, y algunos minutos antes, a Ezequiel D'Angelo en reemplazo de un golpeado Alvarenga, para que el enganche ex San Telmo, a poco estuviera de "clavar" un golazo, en un tiro libre desde la derecha, que por centímetros no "superara" la estirada de Gómez, siempre jugando al límite del adelantamiento, teniendo en cuenta su escasa altura.

Con Kevin Gissi de regreso al campo, en lugar del goleador, Esteban Ciaccheri, en los minutos de cierre, Barracas intentaría apretar a Morón contra Salvá, pero la buena producción de la última linea, impediría no sólo cualquier ocasión manifiesta de gol de la visita, sino también la posibilidad de un tiro libre cerca del área, para el talentoso botín zurdo de Valenzuela.

El pitazo final de Rey Hilfer, de buen arbitraje, "premiaría" a un Morón que debió quedarse con los tres puntos mucho antes, pero fiel a su costumbre, "si no se sufre, no vale".

Volvió a ganar Morón, y se ilusiona con clasificar a "Copa Argentina", mientras hoy, con su cuarto puesto en la Zona 1, le permitiría acceder también al Reducido.

Ahora a viajar a Santiago del Estero, para visitar a Mitre, el próximo domingo, con lo mucho que se conocen "Cacho" Sialle y el "Aurinegro" santiagueño.

En definitiva, en duelo de "guapos", se impuso el Gallo.



@elgallogustavo.



miércoles, 2 de octubre de 2019

Gallo "Sojero"

Morón llegaba a Carlos Casares, en la noche del martes, con el antecedente de tres fechas sin triunfos, desde aquél 4 a 2 en Mar del Plata, con un segundo tiempo "rápido y furioso", pero fundamentalmente, con el "regusto" amargo de dos partidos de local que podía haber ganado, ante Belgrano y el más reciente, con San Martín de San Juan, y que pese a hallarse en ventaja, no tuvo la contundencia para "cerrarlos" en los momentos oportunos, y por eso terminó repartiendo unidades con ambos contendientes, devenido de la Superliga, en la pasada temporada.

Así las cosas, con la necesidad de ganar pero, en el último de los casos, de sumar de visitante, el equipo de "Cacho" Sialle "saltaba" al "Ofelia Rosenzuaig", con la única modificación de la vuelta de Matías Nizzo, tras cumplir la fecha de suspensión, por su expulsión en Caseros, en lugar de Cristian Lillo, que retornara al banco de los suplentes, con Diego Tonetto de regreso entre los "18", por un Kevin Gissi que, fecha tras fecha, fue perdiendo terreno en la consideración inicial del cuerpo técnico.

Tras el pitazo inicial de Héctor Paletta, y sus polémicos antecedentes recientes, dirigiendo al Gallo, los primeros minutos se disputarían en las inmediaciones del círculo central, y lejos de las áreas, con la pelota circulando demasiado en las "alturas", y por escaso tiempo debajo de las "suela" de los que más saben.

Así las cosas, en una primera etapa mal jugada y sin emociones, donde las imprecisiones dominarían a las intenciones, cada uno contaría con una jugada clara, comenzando allá por los '12 del primer tiempo, cuando de una buen desborde de Mauricio Alonso por izquierda, que no llegara a conectar Esteban Ciaccheri en el "corazón" del área, la jugada se prolongaría por el sector opuesto, donde Nicolás Ramírez se acomodaría para la zurda y ensayaría un remate con destino de red, que Darío Sand, el reemplazante de Martín Perafan (expulsado en la polémica derrota del "Agro", ante Barracas, de la última jornada), evitaría de gran forma, enviándola al córner,

Como contrapartida, algunos minutos más tarde, la sana intención, aunque a veces excesiva, de salir jugando con prolijidad desde el fondo, determinaría que la "presión alta" de local recuperara el balón, y tras el centro desde la derecha de Alejo Montero, Emiliano Tellechea desviara su remate desde inmejorable posición, sobre el poste izquierdo de un Julio Salvá, que hasta allí, no había intervenido, más que para controlar alguna pelota aérea.

Más allá de una buena jugada individual de Nicolás Ramírez, mucho mejor desde lo físico, que en los cotejos anteriores, por poco no desviado al gol por Ciaccheri, y del otro lado, un cabezazo en el segundo palo de Federico Rosso, apenas "ancho", la primera mitad se extinguiría con la sensación de un partido "controlado" en el desarrollo, para la visita, y que de ajustar la "mira" en alguna ocasión que pudiese generarse en el complemento, la idea de llevarse los tres puntos al Oeste, se hallaba bastante próxima, en el camino de lo ideal a lo posible.

Ya en el segundo tiempo, el local intentó "apretar" a Morón contra su arco, con los ingresos de Alejandro Gagliardi y Matías Defederico, pero con la misma falta de ideas que en la etapa inicial, lo que "ilusionaba" con mayores espacios en ofensiva, que pudiesen capitalizar "Nico" Ramírez, Mauricio Alonso (muy maltratado en el primer tiempo, ante la pasividad y permisividad vergonzosas de Paletta) y de Fabricio Alvarenga, de flojo primer tiempo (perdió varias pelotas, que generaron contras peligrosas del local), pero recuperado complemento, ganando con su velocidad y en especial, desprendiéndose de la pelota con mayor rapidez, para evitar que un "rodeo" de más, neutralice su innegable capacidad de ganar la "banda".

Precisamente, con esa misma fórmula, el equipo de Sialle "avisaría" por segunda vez en la noche, a los '5 del complemento, cuando de un centro de Alvarenga, bien pasado hacia el segundo palo, nuevamente "Nico" Ramírez tuviese el gol en su botín (esta vez, el derecho), y escogiendo darle fuerte y cruzado, a diferencia del primer intento angulado y con "comba", el "1" de Agropecuario, Darío Sand, volvería a "ahogar" el grito visitante, rechazando un remate fortísimo, que debió "quemarle" los guantes.

Del otro lado, el "Sojero"se repetía en intentos por los laterales, tanto con Exequiel Narese como con Nicolás Dematei, que terminaban una y otra vez, en centros bien controlados por Salvá, o repelidos por una última línea de Morón sin fisuras, con un correcto partido de sus cuatro protagonistas, Matías Cortave, Valentín Perales, Emiliano Mayola y Nicolás Martínez, de derecha a izquierda.

De esta manera, sin "sufrir" el encuentro en su propia área, a pesar del dominio estéril del balón y el terreno por parte del local, a los '12 del segundo tiempo, Maurico Alonso, otra vez de buen partido, rápido y "picante" cuando tiene compañeros cercanos para la descarga, sin aislarse en corridas solitarias, cedería a Cristian Lillo que, en su primera pelota habilitaría por el centro a Ramírez, para luego de dejar en el camino a su marcador, con la calidad que lo caracteriza y distingue, sacar un "latigazo" apenas desde fuera del área, para ponerla bien junto al poste zurdo de Sand, evitando que el arquero de "Agro" volviese a erigirse en figura, ratificando un viejo "axioma" de la vida, perfectamente aplicable al fútbol: "la tercera fue la vencida".

Con el uno a cero a favor, justificado en las mejores opciones y la mejor "lectura" táctica, dentro de un partido cerrado y desprolijo, Lucas Pérez Godoy debería abandonar el campo de juego, unos minutos antes del gol, luego de una "patada" que, al parecer, hubiese agravado la contractura que acarreaba desde la semana previa al partido con los sanjuaninos (ante la mirada permisiva, una vez más, de Héctor Paletta), permitiendo el ingreso de Crisitian Lillo, quien esta vez sí, volvería a ser el de costumbre, agregándole al "corazón" y la prodigalidad generosa de siempre, la ubicación y el timming para colaborar con la defensa, y con Matías Nizzo en el medio, en momentos que aún sin ideas, el local se venía con empuje y la peligrosidad de sus individualidades, como Gagliardi, Defederico y el ingresado Mauro Albertengo.

Con alguna zozobra, en un par de acciones puntuales, Morón lograría controlar a su rival en la última línea, mientras que de contra contaba con la oportunidad latente de "liquidar" el pleito, como aquella que tuviera otra vez en los pies de Nicolás Ramírez, la figura de la noche, por el gol, pero también por su muy buen partido, con la grata noticia extra de jugar los '90, sin problemas físicos, pero en su cuarto "mano a mano" con el arquero, esta vez, más "cara a cara" que nunca, decidiera darle de derecha, por tener la zurda "tapada" y la pelota que debió tener destino de red, terminaría en las manos de Sand, para mantener con "vida" al "Sojero", hasta el último "suspiro".

Por fortuna, con Diego Tonetto en lugar de Mauricio Alonso y casi en el epílogo, de Agustín Lavezzi por el mejor de todos, Nicolas Ramírez, Morón no "sufriría" los minutos finales, ni el tiempo adicionado, llevándose al Oeste tres puntos fundamentales, merecidamente ganados dentro de la cancha, con sacrificio, transpiración y entrega en todos los sectores.

Con sus "módicos" pero firmes argumentos, sin sobrarle nada, pero con la justicia en el arco rival, la misma que le faltara ante Belgrano y San Martín de San Juan.

El que quiera "brillo", que se "lustre" los zapatos. Mientras tanto, el Morón de "Cacho" Sialle suma y sigue, en el parejo y competitivo torneo de la Primera Nacional.



@elgallogustavo.