Morón hizo (casi) todo para volverae de Casanova con los tres puntos, pero debió conformarse con un empate a uno, refrendable en la previa, pero con gusto a poco, por cómo se dio el trámite del partido.
Y es que el Gallo fue más que Almirante, en el global de los 90', fue protagonista y superó en el juego al local, que no tuvo otra opción que jugar de contragolpe, aún frente a su gente, y cuando Morón se quedó con un jugador de menos, a falta de quince minutos para el cierre del encuentro, aún así el equipo de Nardozza no se vio desbordado por un modesto Brown, pudiendo incluso llevarse el partido, en los pies de Gonzalo Berterame, el mejor de la cancha y autor de la apertura del marcador, en el epílogo de la primera parte.
Con los retornos desde el minuto cero, tanto de Ezequiel Rescaldani como de Santiago Sala, en reemplazo de Matías Romero y Jonathan Cañete, respecto del once de inicio frente a Atlanta, desde el pitazo inicial de Yamil Possi, Morón se plantó en terreno rival y poco le importó el escenario adverso, ya que asumió el protagonismo casi exclusivo del encuentro, con el buen andar de sus medios, tanto de Gastón González como de Juan Manuel Olivares, sumados a un Julián Vitale cada vez más asentado como único volante central y el gran momento de Berterame, que volvería a anotarse en el marcador, por segundo cotejo consecutivo, importante en el retroceso defensivo y preponderante en cada diagonal en el áerea contraria.
Sin pasar zozobras en defensa, aunque sin inquietar tampoco en el arco de enfrente, el Gallo parecía encaminarse a un cero a cero parcial, con buenas sensaciones, pese al domino territorial y de balón no traducido en situaciones de riesgo, hasta que a los 45 de la etapa inicial, González cediera a Nicolás Henry por izquierda y del centro largo y profundo al segundo palo, emergiera Gonzalo Berterame para empujarla de "pecho" al gol y a pesar de la escasez de ocasiones de gol, "premiar" el protagonismo y el andar más sólido del Deportivo Morón en Isidro Casanova.
Y habría tiempo para más, en el agregado, con una patada de expulsión de Facundo Miño, el primer marcador central local, en perjuicio de Rescaldani, que Yamil Possi no se animó a sancionar con la severidad que requería el golpe artero, "maquillando" la sanción con una amarllla, que terminaría por perjudicar a Morón, máxime teniendo en cuenta la diferencia de "vara" aplicada en el complemento, con la roja a Facundo López.
Así como Morón "pegó" al final del primer tiempo, en una de las escasas acciones bien hilvanada por Almirante en todo el partido, casi desde el vestuario el local hallaría un empate impensado, a partir de una gran pelota "filtrada" por Santiago Gauna, entre un adelantado Henry y un Agustín Gómez que no llegaría al cierre, para que el resiliente Brian Fernández, mano a mano con Juan Martín Rojas, la impulse con clase a la red, para convertir su primer gol desde septiembre de 2023, jugando para el Morelia de México y desde 2022 en nuestro medio... Justo frente a nosotros, a los seis minutos del segundo tiempo y en otra falla compartida y costosa de la defensa visitante.
Daba la sensación que, de no haber permitido ese desliz evitable de poner a Brian Fernández, con todos sus problemas personales, pero también con su enorme jerarquía a cuestas, de cara a Rojas, casi en la primera acción sería del complemento, Almirante podría haber intentado toda la tarde sin ideas. Era cuestión de no equivocarse en defensa y Morón una vez se equivocó y permitió que el mejor de Almirante lo aprovechase.
Con el empate en uno y el apoyo de su gente, "La Fragata" se envalentonó y tomó los hilos del encuentro, buscando un triunfo que cortara con 14 años sin festejos ante el Gallito, protagonismo que profundizaría con torpeza y sin argumentos futbolísticos, en los últimos quince de juego, cuando Yamil Possi se volviera a equivocar feo en perjuicio de Morón, con la expulsión por doble amonestación de Facundo López, cuando la primera amarilla ni siquiera había sido infracción.
Sin embargo y pese al jugador de menos, el equipo de Fabián Nardozza no perdería la línea y bien pudo ganarlo en una contra, que encontró una vez más a Gonzalo Berterame frente a Ramiro Martínez, arquero local, pero esta vez se impondria en el duelo personal, el "Mono" y capitán del elenco de Isidro Casanova.
Empató Morón ante Almirante y sumó en un escenario siempre difícil, aunque dado el desarrollo de los 90 y pico, el punto resultara con sabor a poco.
En la goleada ante Atlanta y el 1 a 1 en Casanova, Morón mostró otro semblante individual y colectivo, que ahora deberá ratificarlo nada menos que ante Colón, uno de los líderes y máximos candidatos al ascenso.
Era "Fragata" hundida y Morón le perdonó la vida.
@elgallogustavo.
📸: Eduardo Fabián Acuña.
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